L D (EFE) La historia se repite con Míchel Salgado. Como ya ocurrió en la concentración previa a la Eurocopa de Portugal cayó lesionado en los primeros entrenamientos y, aunque es la misma zona que se dañó en aquel momento, el primer examen médico apunta a que no reviste tanta gravedad. Míchel se lesionaba al realizar un mal gesto en uno de los ejercicios de presión, como explicaba Genaro Borrás, que se mostraba optimista tras explorar al jugador.
"La primera impresión es que es una fuerte contractura y no hay ningún daño anatómico. La exploración nos habla de una fuerte contractura en los isquiotibiales de la pierna derecha, la misma zona que se lesionó de forma más aguda hace dos años", informaba. "La prueba que confirmará si es una fuerte contractura o una pequeña rotura se realizará dentro de dos días, porque será más certera a las 48 horas. Mi impresión es que esta vez no hay daño anatómico que no se pueda resolver en cinco días", admite el médico.
Esta opción es la más optimista y la lesión se quedaría en una semana. De momento está descartado para jugar en Albacete ante Rusia y en el caso de que fuese rotura muscular, Luis Aragonés se vería obligado a llamar a otro jugador. "En caso de que fuese rotura no hay posible solución en menos de quince días", confirmaba el doctor. "Los doctores hacemos una valoración medica y luego es el seleccionador el que debe decidir. En caso de contractura no hay problema y estará bien para el Mundial". "Se ha realizado la lesión en un mal gesto, con un nivel de energía fuerte. Ha caído en una mala posición, cambiando el gesto en el último momento. Lo vi perfectamente y no me pareció un gesto de rotura", puntualizaba.
Por último, Genaro Borrás admite que vio perjudicado anímicamente a Míchel Salgado. "Anímicamente no está muy bien. Una persona que lleva esperando esta fecha, que tiene un recuerdo muy parecido anterior. Además una contractura es más dolorosa que una lesión puntual, él tenía mejores sensaciones la otra vez que ahora pero las médicas son mucho más buenas ahora", concluyó.
"La primera impresión es que es una fuerte contractura y no hay ningún daño anatómico. La exploración nos habla de una fuerte contractura en los isquiotibiales de la pierna derecha, la misma zona que se lesionó de forma más aguda hace dos años", informaba. "La prueba que confirmará si es una fuerte contractura o una pequeña rotura se realizará dentro de dos días, porque será más certera a las 48 horas. Mi impresión es que esta vez no hay daño anatómico que no se pueda resolver en cinco días", admite el médico.
Esta opción es la más optimista y la lesión se quedaría en una semana. De momento está descartado para jugar en Albacete ante Rusia y en el caso de que fuese rotura muscular, Luis Aragonés se vería obligado a llamar a otro jugador. "En caso de que fuese rotura no hay posible solución en menos de quince días", confirmaba el doctor. "Los doctores hacemos una valoración medica y luego es el seleccionador el que debe decidir. En caso de contractura no hay problema y estará bien para el Mundial". "Se ha realizado la lesión en un mal gesto, con un nivel de energía fuerte. Ha caído en una mala posición, cambiando el gesto en el último momento. Lo vi perfectamente y no me pareció un gesto de rotura", puntualizaba.
Por último, Genaro Borrás admite que vio perjudicado anímicamente a Míchel Salgado. "Anímicamente no está muy bien. Una persona que lleva esperando esta fecha, que tiene un recuerdo muy parecido anterior. Además una contractura es más dolorosa que una lesión puntual, él tenía mejores sensaciones la otra vez que ahora pero las médicas son mucho más buenas ahora", concluyó.