L D (Europa Press) Ante el Grupo Socialista en el Congreso, Manuel Chaves animó a los diputados socialistas a "apurar hasta el último día" de la tramitación de la proposición de Ley de reforma del Estatuto de Autonomía en las Cortes Generales para "atraer al PP". Señaló que no mantiene ningún "temor, resquemor o suspicacia" ante el Congreso porque su "labor fundamental es compaginar los intereses de los andaluces con los intereses generales de los españoles". "Del Congreso de los Diputados saldrá un Estatuto mejor pero sin cambios sustanciales", vaticinó Manuel Chaves.
Según dijo, el texto andaluz "se ajusta al marco constitucional" tanto en materia de competencias, donde se ha "tenido en cuenta" la jurisprudencia del Tribunal Constitucional (TC) como en financiación autonómica, donde se respetan "los principios que siempre hemos defendido en el PSOE" de negociación multilateral, corresponsabilidad fiscal y autonomía financiera.
En relación con la polémica por la pretensión andaluza de asumir la competencia exclusiva sobre la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir (CHG), Chaves animó a los diputados socialistas a "leer" el artículo 50 para que puedan comprobar que se reserva la planificación general de las cuencas en manos del Estado y se mostró convencido de que "no habrá ningún tipo de problema una vez que resolvamos el tema en el Congreso para que todo el mundo se quede absolutamente tranquilo y los intereses de Extremadura, Castilla La Mancha y Murcia queden protegidos".
Además, el presidente de la Junta dijo que Andalucía se define en el Estatuto como "nacionalidad histórica" en el marco del artículo 2 de la Constitución, adelantó que el PSOE incorporará referencias expresas a la "unidad indisoluble de la nación española" vía enmiendas en el Congreso y señaló que la "razón más importante" para reconocer la 'realidad nacional' de Andalucía en el preámbulo reside en que "es el término que conecta este Estatuto con el 28-F, aunque quizá haya que estar en Andalucía para entenderlo".
Un "acto de soberbia" del presidente "de la exclusión"
La intervención del presidente del PP andaluz ante los diputados y senadores de Andalucía tuvo un tono muy distinto a la de Manuel Chaves. Javier Arenas describió la jornada como un día "triste, de enfrentamiento y de discordia" porque "se va a aprobar un Estatuto que nos divide y que no cuenta con el consenso en el Parlamento andaluz ni en el Congreso de los Diputados". Además, destacó que se iba "a presenciar cómo el bipartidismo que forman en Andalucía PSOE e IU tiran por la borda 25 años de consenso estatutario".
"Hoy deberíamos estar los cuatro grupos parlamentarios de Andalucía presentando este proyecto, sin embargo, nos encontramos ante un acto de soberbia y prepotencia por parte del presidente de la Junta, Manuel Chaves, que nos presenta un texto que puede ser debatido porque cuenta con la oposición del 40 por ciento del Parlamento andaluz", apuntó el líder del PP-A, que advirtió de que de haberse respetado la necesidad de dos tercios para sacar adelante el proyecto, no se hubiese podido debatir. Por ello, calificó a Chaves como el presidente de la "exclusión".
"Hoy deberíamos tener un texto consensuado, ya que las constituciones y los estatutos no pueden llevar apellidos", destacó Arenas, que sí dejó claro que él considera que "antes de presentar un Estatuto que nos divide, mejor nos quedamos con el texto existente, que contaba con el consenso del cien por cien de los andaluces". El dirigente popular expresó además su temor a que el PSOE pretenda utilizar el Estatuto andaluz para "tapar los errores cometidos con la reforma del Estatut de Cataluña, que ha tumbado a un gobierno". En su intervención, Arenas aprovechó para pedir a los parlamentarios que "se pongan a trabajar en la elaboración de la enmiendas" para lograr "una Andalucía de primera en la España constitucional".
Muere el padre de Javier Arenas
El presidente del PP andaluz faltará al debate en el Congreso sobre la toma en consideración de la reforma debido al fallecimiento de su padre, Eduardo Arenas Ramírez, que murió en Sevilla a los 80 años de edad, según informaron a Europa Press fuentes populares. Natural de Olvera (Cádiz), Eduardo Arenas se encontraba desde hacía casi tres semanas ingresado en un hospital de la capital andaluza. El dirigente popular se ha desplazado inmediatamente a la capital andaluza tras conocer la noticia.
