L D (EFE) Morabito ganó la partida a Van Goolen en los últimos metros del ascenso a Leukerbad y entró en solitario con un tiempo de 5h.37.47, estrenando así, a sus 23 años, el palmarés en el primer año como profesional. A 12 segundos entró el corredor belga y a continuación el grupo principal con el español Vicioso al frente, acompañado de Koldo Gil, Manuel Beltrán, José Gómez Marchante y Jan Ullrich. Ángel Vicioso, ganador en la víspera y que se encontraba a 13 segundos del líder, pasó a encabezar la clasificación general, con su compañero alemán Jorg Jaksche a continuación a 3 segundos y tercero su compatriota Gerdemann, del T-Mobile, a 4 segundos. Otros dos españoles se encaramaron en los puestos de honor, ya que Koldo Gil (Saunier) es cuarto a 8 segundos y David Cañada, del mismo equipo, quinto a 15 segundos.
La primera etapa de montaña, con un puerto en los primeros kms y final en alto, fue movida desde el banderazo de salida, con el pelotón empeñado en anular escapadas que pudieran ser peligrosas para el líder Nick Nuyens, pero 6 hombres se empeñaron en el km 46 de cambiar el signo de la jornada; además, de forma definitiva. El suizo Steve Morabito (Phonak), los belgas Jürgen van Goolen (Discovery) y Maxime Monfort (Cofidis), el alemán Ralf Grabsch (Milram), el finlandés Kjell Carlstrom (Liquigas) y el bielorruso Alexandre Usov (Ag2R) se despidieron del grupo con afán colaborador en larga aventura, con relevos generosos que iban abriendo hueco a pasos agigantados.
En el km 55 ya contaban con 4 minutos de ventaja, en el 66 la diferencia se disparaba a 7 y en el 150 la máxima diferencia alcanzó los 12.05 minutos. La fuga tenía claros tintes de llegar a dilucidarse entre 6 corredores. Media docena de minutos con los obstáculos del Varen (4a) y del Leukerbad por delante, con sus duras rampas, era la renta a mantener. Las fuerzas empezaron a flaquear en el ascenso final y en el pelotón se producía el zafarrancho, con el T-Mobile en actitud atacante. Kirchen, Sinkewitz, Guerini y Michael Rogers siempre rodaban al lado de su jefe, Jan Ullrich
El líder Nuyens se despedía del maillot amarillo y por delante dos hombres se marchaban por delante, Morabito y Van Goolen, superiores a sus compañeros de escapada. El grupo tenía un retraso de 3 minutos a 10 kms de meta pero el ritmo era frenético en busca de la cabeza de carrera. Morabito, con el pelotón a 1.30 minutos intentó descolgar a Van Goolen a 3 kms de meta. Pretendía alcanzar la mayor victoria de su carrera, pero el belga no cedía a pesar de sus muestras de debilidad y se agarraba a su rueda. El español Alberto Contador (Wurth) atacó en el grupo principal y contactó con Carlstrom.
Van Goolen trató de abandonar la compañía de Morabito a falta de 500 metros, sin éxito y luego fue el suizo quien remachó su triunfo con un arranque incontestable. Una brillante forma de inaugurar su palmarés. Este jueves se disputa la sexta etapa entre Fiesch y La Punt, de 212,2 kms, con dos puertos de categoría especial (Furkass y Albulapass, kms 49 y 212) y uno de primera (Overalpass, km 71).
La primera etapa de montaña, con un puerto en los primeros kms y final en alto, fue movida desde el banderazo de salida, con el pelotón empeñado en anular escapadas que pudieran ser peligrosas para el líder Nick Nuyens, pero 6 hombres se empeñaron en el km 46 de cambiar el signo de la jornada; además, de forma definitiva. El suizo Steve Morabito (Phonak), los belgas Jürgen van Goolen (Discovery) y Maxime Monfort (Cofidis), el alemán Ralf Grabsch (Milram), el finlandés Kjell Carlstrom (Liquigas) y el bielorruso Alexandre Usov (Ag2R) se despidieron del grupo con afán colaborador en larga aventura, con relevos generosos que iban abriendo hueco a pasos agigantados.
En el km 55 ya contaban con 4 minutos de ventaja, en el 66 la diferencia se disparaba a 7 y en el 150 la máxima diferencia alcanzó los 12.05 minutos. La fuga tenía claros tintes de llegar a dilucidarse entre 6 corredores. Media docena de minutos con los obstáculos del Varen (4a) y del Leukerbad por delante, con sus duras rampas, era la renta a mantener. Las fuerzas empezaron a flaquear en el ascenso final y en el pelotón se producía el zafarrancho, con el T-Mobile en actitud atacante. Kirchen, Sinkewitz, Guerini y Michael Rogers siempre rodaban al lado de su jefe, Jan Ullrich
El líder Nuyens se despedía del maillot amarillo y por delante dos hombres se marchaban por delante, Morabito y Van Goolen, superiores a sus compañeros de escapada. El grupo tenía un retraso de 3 minutos a 10 kms de meta pero el ritmo era frenético en busca de la cabeza de carrera. Morabito, con el pelotón a 1.30 minutos intentó descolgar a Van Goolen a 3 kms de meta. Pretendía alcanzar la mayor victoria de su carrera, pero el belga no cedía a pesar de sus muestras de debilidad y se agarraba a su rueda. El español Alberto Contador (Wurth) atacó en el grupo principal y contactó con Carlstrom.
Van Goolen trató de abandonar la compañía de Morabito a falta de 500 metros, sin éxito y luego fue el suizo quien remachó su triunfo con un arranque incontestable. Una brillante forma de inaugurar su palmarés. Este jueves se disputa la sexta etapa entre Fiesch y La Punt, de 212,2 kms, con dos puertos de categoría especial (Furkass y Albulapass, kms 49 y 212) y uno de primera (Overalpass, km 71).