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PIDE AL PRESIDENTE GUSMAO FORMAR UN GOBIERNO INTERINO

Alkatiri renuncia al cargo de primer ministro y admite su responsabilidad en la revuelta armada

El primer ministro de Timor Oriental, Mari Alkatiri, anunció que presentó su dimisión tras reconocer su "parte de responsabilidad" en los hechos violentos que sumieron a la isla en una crisis. Su intención, destacó en una conferencia de prensa transmitida por los medios de comunicación australianos, es evitar que renuncie el presidente Xanana Gusmao.

LD (EFE) En una conferencia de prensa transmitida por televisión a nivel nacional, el primer ministro de Timor Oriental, Mari Alkatiri, presentó su renuncia al cargo tras reconocer su "parte de responsabilidad en la crisis que afecta a nuestra nación".
 
Alkatiri dijo que estaba dispuesto a dejar su cargo para evitar que dimita el presidente del país, Xanana Gusmao. Antes, afirmó que estaba preparado para renunciar "considerando que por encima de cualquier otro interés está el de la nación".
 
En una declaración escrita señala que ha "reflexionado profundamente" sobre la situación que vive el país y que está determinado a "no contribuir a la profundización de la crisis". Además, destacó que está dispuesto a dialogar con Gusmao "para contribuir, si es necesario, a la formación de un Gobierno interino".
 
La dimisión de Alkatiri, que volverá a ocupar su puesto como diputado del, se produjo un día después de que el ministro de Exteriores y Defensa, José Ramos Horta, renunciara a sus cargos, al igual que lo hizo el ministro de telecomunicaciones, Ovidio Amaral, como forma de protesta, hasta que el partido Fretilin en el Gobierno escogiera a un nuevo líder.
 
Alkatiri recibió este domingo el apoyo de su partido, el Fretilin, que tomó una decisión consensuada de mantener al primer ministro en el cargo a pesar de las presiones de políticos, ciudadanos y de la iglesia a favor de su dimisión. El primer ministro es culpado por gran parte de la opinión pública timorense de causar la ola de violencia ocurrida en el país tras el despido de seiscientos militares -un tercio de todos los efectivos- en marzo pasado, por manifestarse para exigir el fin de la discriminación étnica.
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