(Libertad Digital) La Unión Democrática de Estudiantes (UDE), representada en el Consejo Escolar del Estado, se opuso en su día a la asignatura de Educación para la Ciudadanía y los Derechos Humanos por considerar que se trataba de un proceso de vulgarización de la enseñanza, cuando lo que ésta necesitaba era poner el énfasis en la mejora de los resultados del aprendizaje académico.
No obstante, aprobada la Ley de Educación, UDE reclama que, ya que la nueva asignatura es obligatoria para todos los alumnos, sus contenidos se limiten a la transmisión de los principios constitucionales. En este sentido, UDE cree que el rechazo a las actitudes de exclusión –desde la homofobia hasta el acoso al PP en Cataluña– debe formar parte del currículum, pero dicho temario debe limitarse a esto, sin invadir el derecho de los padres a educar a sus hijos en sus convicciones.
UDE decidirá esta semana si se suma a la manifestación convocada contra la asignatura, en función de los lemas y mensajes que se vayan a transmitir. La concentración está fijada para el próximo 18 de noviembre en Madrid.
La Confederación de Padres de Alumnos (COFAPA) ha denunciado este lunes el planteamiento "laicista" que –a su juicio– reina en el borrador de diseño de Educación para la Ciudadanía y los Derechos Humanos. Así, la presidenta de COFAPA, Mercedes Coloma, ha insistido en que los padres, como primeros y principales educadores, son quienes deben decidir los valores y actitudes que han de transmitirse a sus hijos por lo que considera que la redacción del reglamento de esta asignatura sigue estando orientada a imponer a las familias un "planteamiento laicista de la realidad, opuesto a la ética que mantienen millones de familias en España".