L D (EFE) Fuentes de la policía autonómica han informado hoy que los hechos sucedieron el pasado día 30 de noviembre cuando tres hombres con la cara tapada y con guantes entraron por la fuerza en el domicilio aprovechando que el hijo de la familia estaba abriendo la puerta.
Cuando llegó poco después la madre al piso, la amenazaron para que les facilitara los números secretos de la caja fuerte. Los ladrones se llevaron casi todo lo que encontraron en el interior de la caja: unas 5.500 monedas con un elevado valor numismático, once relojes de oro y una cincuentena de piezas de joyería de oro, ya que el propietario del piso asaltado se dedica a la compra y venta de este material.
Tras el asalto, las tres personas huyeron en una furgoneta que posteriormente se ha comprobado que se trataba de un vehículo de reparto de una frutería robado en la localidad barcelonesa de Montornés del Vallés.
Al cabo de unos días, un compañero de profesión se puso en contacto con el propietario del piso robado ofreciéndole la posibilidad de recuperar los objetos sustraídos a cambio de unos 300.000 euros.
Esta persona, que ya era conocida por el empresario asaltado por haber mantenido varias relaciones comerciales, aseguró que le habían ofrecido el material robado y que, antes de que las monedas salieran del país, le avisaba por si quería recuperar el botín.
Tras una negociación entre ambos, se fijó un precio final de 250.000 euros y una fecha de entrega, momento en el que ambos fueron seguidos por los agentes policiales que constataron que el compañero de profesión acompañaba al propietario de las monedas hasta una calle del barrio barcelonés de Sants, donde en una furgoneta alquilada se encontraba el material robado dentro de maletas negras.
Los mossos procedieron entonces a detener a Aldo B., de 74 años, nacido en Italia y vecino de Vallirana (Barcelona), que cuenta con un antecedente policial también por otro robo similar realizado hace unos tres años en Barcelona. Tras pasar a disposición judicial, el juez le ha dejado en libertad con cargos.
Cuando llegó poco después la madre al piso, la amenazaron para que les facilitara los números secretos de la caja fuerte. Los ladrones se llevaron casi todo lo que encontraron en el interior de la caja: unas 5.500 monedas con un elevado valor numismático, once relojes de oro y una cincuentena de piezas de joyería de oro, ya que el propietario del piso asaltado se dedica a la compra y venta de este material.
Tras el asalto, las tres personas huyeron en una furgoneta que posteriormente se ha comprobado que se trataba de un vehículo de reparto de una frutería robado en la localidad barcelonesa de Montornés del Vallés.
Al cabo de unos días, un compañero de profesión se puso en contacto con el propietario del piso robado ofreciéndole la posibilidad de recuperar los objetos sustraídos a cambio de unos 300.000 euros.
Esta persona, que ya era conocida por el empresario asaltado por haber mantenido varias relaciones comerciales, aseguró que le habían ofrecido el material robado y que, antes de que las monedas salieran del país, le avisaba por si quería recuperar el botín.
Tras una negociación entre ambos, se fijó un precio final de 250.000 euros y una fecha de entrega, momento en el que ambos fueron seguidos por los agentes policiales que constataron que el compañero de profesión acompañaba al propietario de las monedas hasta una calle del barrio barcelonés de Sants, donde en una furgoneta alquilada se encontraba el material robado dentro de maletas negras.
Los mossos procedieron entonces a detener a Aldo B., de 74 años, nacido en Italia y vecino de Vallirana (Barcelona), que cuenta con un antecedente policial también por otro robo similar realizado hace unos tres años en Barcelona. Tras pasar a disposición judicial, el juez le ha dejado en libertad con cargos.