Están recogidos en la Orden de 12 de noviembre de 2009 y en ella se conceden las distinciones al mérito laboral en Andalucía en su tercera edición. Estos premios los gestiona la Consejería de Empleo. Son ocho premios y dos menciones especiales.
De los 8 premios, cuatro corresponden a militantes sindicalistas de Comisiones Obreras y UGT. Otros dos corresponden a personal de la Junta de la máxima confianza de la presidencia de la Junta. Al parecer, el mérito laboral lleva camino de ser algo exclusivo de las organizaciones sindicales o de personas de la máxima confianza del PSOE, bien afiliados, simpatizantes o bienavenidos. Otra muestra del "talante" abierto y generoso del régimen.
Los cuatro sindicalistas premiados son los siguientes:
Lorenza Cabral Oliveros, una de las personalidades distinguidas, fue una de las fundadoras de CCOO de la Enseñanza en 1973 y desde entonces ha ocupado distintos cargos de responsabilidad en el sindicato. Pertenece al Consejo Económico y Social de Andalucía desde su fundación.
Entre los personajes reconocidos figura también José Ramírez Ramos, que se afilió al sindicato UGT en 1975, organizó en su pueblo, Montegícar (Granada), la central como secretario general local y llevó a cabo una de sus tareas más queridas como sindicalista: acompañar a los jornaleros y jornaleras de la vendimia hasta Francia para vigilar y asesorar sobre las condiciones de trabajo.
Por su parte, Julio Ruiz Ruiz contribuyó a la consolidación de CCOO en todo el territorio andaluz, desde su importante papel en la Secretaría de Organización de la ejecutiva regional, de 1987 a 1992, y su llegada a la Secretaría General en el VI Congreso, celebrado en 1992 en Sevilla. En los 12 años que permaneció al frente de la dirección regional andaluza se completó el fortalecimiento y la consolidación de todas las estructuras regionales de CCOO en Andalucía y sobre todo, materializó su convicción por el diálogo social, puesto en valor por distintos acuerdos de concertación.
Otro de los premiados, Rafael Valera Rey, organizó en Cádiz, junto a otros compañeros, la UGT en Telefónica, donde ostentó diferentes responsabilidades locales y provinciales. En 1982 llegó a ser presidente del Comité de Empresa.
Otro premio ha ido destinado a quien ha sido personal de máxima confianza de los presidentes socialistas de la Junta, Lucía Marrufo Rodríguez, viuda con cuatro hijos, que entró en 1978 para desempeñar tareas de limpieza en el Edificio del Pabellón Real, sede del primer gobierno preautonómico de Andalucía.
Hasta su jubilación en 2000, continuó trabajando en el Pabellón Real, en el Palacio de Monsalves y en el Palacio de San Telmo, sedes sucesivamente de los gobiernos de la Junta de Andalucía. Desde 1984 fue encargada general de la limpieza y ha conseguido que tres de sus hijos estén en la Junta de Andalucía.
Tambièn se ha distinguido a título póstumo la labor desarrollada por la funcionaria Guadalupe Fernández, que en 1985 ingresó en la Junta de Andalucía como jefa de sección de Régimen Interior y Personal de la Consejería de Economía y Hacienda.
En esta misma Consejería también fue jefa de la sección de Documentación y Estudios, asesora técnica de recursos y jefa de servicio de Presupuestos de Entidades Gestoras de la Seguridad Social. Desde 1987 ostentaba la Jefatura del Servicio de Legislación de la Secretaría General Técnica de la Consejería de Economía y Hacienda.
Respecto a personas que no están vinculadas directamente al PSOE o a los sindicatos, hay cuatro reconocimientos, dos a título póstumo
Domingo de Torres Pérez, emprendedor malagueño que en la década de los 70 creó una empresa de grúas dedicadas al transporte especial. La empresa que preside Acotral, alcanzó la categoría de interproveedor de transportes de la cadena Mercadona en el año 2003.
También ha participado en la creación de otras empresas como Picking Pack, Charanga o Puerto Seco de Antequera. Fue igualmente impulsor de la creación del CTM en Málaga (Centro de Transporte de Mercancías de Málaga). Multipremiado por el PSOE a esscala nacional y provincial y bienavenido con el PSOE.
Rafael Álvarez Colunga, dirigente empresarial vinculado al PSOE al que ayudó en las primeras campañas electorales prestándole incluso locales propios. En 1996 accedió a la presidencia de la Confederación de Empresarios de Andalucía (CEA), responsabilidad que ostentó hasta 2002. Participó en la fundación de la CEOE, organización de la que fue vicepresidente desde 1999 hasta 2002, y cuando murió seguía vinculado a la representación empresarial como presidente de honor de la CEA.
Por su lado, José María Cruz Rodríguez, fallecido recientemente, se dedicó a la asesoría integral de empresas y a la auditoría, puesto que ostentó en la Cámara de Comercio de Sevilla y el Consejo General de Cámaras de Comercio de Andalucía. Fue presidente en funciones del Sevilla FC en dos ocasiones.
Y también, por razones de oportunidad, se ha premiado al recientemente herido Emilio Morenatti un fotógrafo andaluz cuyo trabajo ha sido distinguido con los premios Andalucía de Periodismo y Europeo de Fotografía Fujifilm, entre otros. En 2003, Morenatti dejó su trabajo en Sevilla para ir a zonas de conflicto permanente, y estuvo un año en Kabul con Associated Press y casi dos años en Israel.