Este es un viejecito trepador que me recuerda( en malo) a esos muñecos cutres que suelen colgar en los balcones navideños. Lagarto, lagarto!
Los viejitos nunca han sobrado, "la sonrisa etrusca" yo calificaría esa novela como aburrida, nota 5
"La hoja roja" Miguel Delibes, mucho mejor prosa, mucho mas profunda, , nota 8.
Es la diferencia entre uno que escribe y un escritor. Es mi opinión por supuesto.
Saludos
Nuevodem: además de La sonrisa etrusca, toca también el tema de la vejez y la enfermedad en la novela corta Monte Sinaí, que añado a la lista de lo que hay que releer o leer.
Animo a releer, o leer por primera vez, La sonrisa etrusca, de José Luis Sampedro. Los viejos, no sobran en nuestra sociedad. Una breve reflexión en
http://norbacultura-newculture.blogspot.com/2011/1...
Un chaquetero insigne.
Que le den.
El último premio zapaterino a un zapaterino.
Menos mal que la transmisión de poderes iba ser leal, respetuosa y modélica.
Pasta para el cine cejatero, pasta la memoria de la cheka, trabajo funerario para el Valle de los Caídos, y ahora honores y pasta para este letrado abuelo cebolleta sectario Sampedro.
Febríl la actividad de este Gobierno en funciones.
Mariano que te destinan La Moncloa a la Fundación Pablo Iglesias.
Creo que Sampedro merece el premio, es un extraordinario novelista.
De momento no estoy de acuerdo con su ideario político: franquista hasta los tuétanos durante la dictadura, marxista convencido durante el imbecilato, apostol del perroflautismo durante el perroflautato, y supongo que a poco que le vaya bien a Rajoy en la próxima legislatura, se declarará liberal de los de toda la vida, o vaya usted a saber qué.
Pero, al César lo que es del César, José Luis Sampedro escribe como los ángeles. Mi sincera enhorabuena por el premio.
Cómo no, uno de los mentores intelectuales de los mal lllamados "indignados".
Entre los miembros del jurado, hay un señor llamado Jordi Cornudella i Martorell, que debe de ser cosa fina, espécimen de la catalanidad más catalufa, esencialista y recalcitrante. Me recuerda a esos personajes ficticios que se inventa Pío Moa (Bofarull i Bofarull, Ripollet i Bohigas, etc.)
Quien niegue o ponga en duda la afirmación inequívoca de que "La sonrisa etrusca" es un plastazo sin sustancia ni literatura, que pruebe a leerla (si es que es grande su espíritu de sacrificio).
Aburre hasta a los naturales de Calabria (me consta por experiencia propia).