L D (EFE) El secretario general de la AUGC, Joan Miquel Perpinyá, dijo después de haber entregado su queja individual: "Hemos venido a demandar amparo y a plantear la penosa realidad de modificar un régimen disciplinario, a decirle al Gobierno que tiene que dignificar nuestra profesión y que merecemos ser tratados como el resto".
Perpinyá destacó en especial que aún siguen internando a agentes de la Guardia Civil en prisiones militares y que continúan siendo privados de su libertad por sanciones administrativas y disciplinarias, contra las que recientemente se pronunció el Tribunal Europeo de Derechos Humanos de Estrasburgo.
El secretario de la AUGC hacía referencia a una decisión de este tribunal que el pasado 2 de noviembre condenó a España por una demanda presentada por un guardia civil que, estando de baja médica, fue sancionado por haberse ausentado del cuartel sin permiso previo de sus superiores para visitar a un familiar gravemente enfermo.
Mayor número de suicidios
También recordó que la Guardia Civil es el colectivo laboral con mayor número de bajas psicológicas y de suicidios, lo que atribuyó en parte al régimen militar al que son sometidos los agentes.
"Estamos cansados del maltrato y de que nos amenacen", dijo Perpinyá, quien añadió que "la paciencia tiene un límite y el Gobierno ya lo ha rebasado". "Si no nos dan lo que pedimos por las buenas, tendrán que hacerlo por las malas", continúo, para concluir diciendo que "la próxima vez no seremos doscientos, sino cuatro mil".