L D (EFE) Poco antes de la liberación, las personas congregadas junto al autobús, incluidos familiares y fuerzas de seguridad, habían empezado a encender velas que habían sido repartidas por la policía para hacer una vigilia, una de las condiciones impuestas por el secuestrador.
El autocar se dirigía de excursión a Tagaytay, un popular centro de recreo al sur de Manila, cuando se detuvo junto al Ayuntamiento de la ciudad. El dueño del centro preescolar había secuestrado el autobús con 32 niños y dos profesores, armado con una granada y otras dos armas.
El secuestrador, identificado como Armando Ducat y propietario del centro Musmos Day Care, aseguró a la cadena de televisión "ABS CBS" que con su acción pretende reivindicar matrículas gratuitas y mejoras educativas para los 145 alumnos del centro. Lo mismo escribió en un cartel que colocó en la parte frontal del vehículo, aunque la policía cree que se trata de una demanda improvisada a última hora para dar legitimidad a la acción.
El autocar se dirigía de excursión a Tagaytay, un popular centro de recreo al sur de Manila, cuando se detuvo junto al Ayuntamiento de la ciudad. El dueño del centro preescolar había secuestrado el autobús con 32 niños y dos profesores, armado con una granada y otras dos armas.
El secuestrador, identificado como Armando Ducat y propietario del centro Musmos Day Care, aseguró a la cadena de televisión "ABS CBS" que con su acción pretende reivindicar matrículas gratuitas y mejoras educativas para los 145 alumnos del centro. Lo mismo escribió en un cartel que colocó en la parte frontal del vehículo, aunque la policía cree que se trata de una demanda improvisada a última hora para dar legitimidad a la acción.
Una granada sin seguro
Uno de los niños, de 6 años, fue liberado al parecer porque tenía fiebre alta, y poco antes también salió en libertad el conductor del vehículo. Ambas liberaciones se produjeron después de que el actor y senador Ramón Revilla negociara en el interior del autobús con el secuestrador.
Uno de los niños, de 6 años, fue liberado al parecer porque tenía fiebre alta, y poco antes también salió en libertad el conductor del vehículo. Ambas liberaciones se produjeron después de que el actor y senador Ramón Revilla negociara en el interior del autobús con el secuestrador.
Según narró entonces Revilla, el secuestrador ha quitado el seguro de la granada con la que está armado en el interior del vehículo. El senador dijo que el secuestrador mantiene obstruido con los dedos el orificio de la granada y que dispone además de una subametralladora Uzi y de una pistola del calibre 45.
"Amo a estos niños, por eso estoy aquí. No voy a disparar a nadie", aseguró Ducat, de 60 años, a una emisora de radio. Sin embargo, la policía ha indicado que ya estuvo implicado en 1989 en otro secuestro, esta vez de dos curas, por un asunto relacionado con las reparaciones de una iglesia.
"Amo a estos niños, por eso estoy aquí. No voy a disparar a nadie", aseguró Ducat, de 60 años, a una emisora de radio. Sin embargo, la policía ha indicado que ya estuvo implicado en 1989 en otro secuestro, esta vez de dos curas, por un asunto relacionado con las reparaciones de una iglesia.