Misteriosos anónimos amenazantes contra Revilla: "Te vamos a cazar"

Así lo cuenta él mismo en El Mundo, en un artículo de opinión sobre la nueva ley antifumadores. El presidente cántabro vuelve a deshacerse en loas a sí mismo por su impecable trayectoria como político y como persona: "Sólo bebo vino tinto en las comidas, jamás he probado la cocaína, ni el hachís ni la marihuan" dice, aunque hay salvedades "una vez cometí la indiscreción de contar mi primera experiencia sexual a los 18 años y casi me lapidan".

Tras la perorata de su irreprochable conducta, Revilla recuerda su único punto oscuro: "Soy como Mariano Rajoy, un empedernido fumador de puros", lo cual, en esta España de la ley antifumadores, le está trayendo problemas.

Una norma que el presidente regional considera "talibanesca", aunque piensa respetarla: "si el Gobierno prohíbe el tabaco juro que lo dejo" asegura. Pero, como también criticaba este mismo martes Arturo Pérez Reverte, le disgusta mucho que nos convierta a todos en "chivatos" del que fuma. "Hubo un tiempo en que la profesión de delator, soplón, chivato, tenía una gran población activa" recuerda, haciendo mención a la Inquisición, al franquismo, al nazismo... argumentando que con el llamamiento de Leire Pajín: "ha resucitado atávicos sentimientos genéticos de mucos españoles que creíamos fenecidos, pero que simplemente estaban adormecidos".

Lo cual, ha sumido a Revilla en una paranoia constante. "Cuando salgo ahora a la calle y enciendo mi puro, miro de reojo y no sé si la sonrisa del vecino es de respeto o encubre una forma delatora" confiesa en El Mundo. Y no es para menos, porque ya ha recibido preocupantes toques de atención: "He recibido varios anónimos con textos así: 'Revilla, te vamos a cazar'", e incluso sus amigos le recomiendan "que tenga cuidado pues van a por mí".

Y es que lo que realmente teme Revilla es que "después de 68 años sin cometer tropelías me encontrase con un titular de prensa donde se afirmase que han cazado a Revilla fumando un puro en lugar prohibido, sería mi final político y ciudadano".

Pero no es la primera vez que los puros de Revilla cobran protagonismo. Hace poco, se agrarró un cabreo monumental con el presidente del PP cántabro porque le apagó un "puro rechupeteao" que el presidente dejaba en el ventana del Parlamento de Cantabria. Incluso, llegó a pedir protección jurídica para su puro.