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Salgado recuerda a los presidentes autonómicos del PP que "es obligación de todos respetar" la Ley Antitabaco

La ministra de Sanidad ha pedido al PP que recuerde a sus presidentes autonómicos que es "obligación de todos" respetar la Ley Antitabaco. Elena Salgado llegó a acusar a las comunidades gobernadas por el PP de parecer "más preocupadas en intentar ampliar la permisividad con el tabaco que en restringir las posibilidades de consumo de esos productos". Tras estas alusiones, Manuel Lamela, consejero de Sanidad de la Comunidad de Madrid, ha denunciado que la ley hace que el fumador "se sienta perseguido", pero manifestó que su Gobierno no pretende "descafeinar" la norma.

La ministra de Sanidad ha pedido al PP que recuerde a sus presidentes autonómicos que es "obligación de todos" respetar la Ley Antitabaco. Elena Salgado llegó a acusar a las comunidades gobernadas por el PP de parecer "más preocupadas en intentar ampliar la permisividad con el tabaco que en restringir las posibilidades de consumo de esos productos". Tras estas alusiones, Manuel Lamela, consejero de Sanidad de la Comunidad de Madrid, ha denunciado que la ley hace que el fumador "se sienta perseguido", pero manifestó que su Gobierno no pretende "descafeinar" la norma.
L D (Europa Press) La ministra de Sanidad se refirió, durante su comparecencia en el Senado, también a la "leve" modificación de la Ley Antitabaco recogida en un Real Decreto Ley de 10 de febrero. Según Elena Salgado, compatibiliza la filosofía de la ley con la disponibilidad del suministro de tabaco a los fumadores. Para ejemplificarlo, recordó que se establecen dos canales de venta: manual, reservada a los estancos, y máquinas expendedoras, que –con el decreto ley–pueden ubicarse también dentro de los quioscos de prensa, además de en los locales en los que no esté prohibido fumar y zonas habilitadas para fumadores de bares, restaurantes y hoteles.
 
Con esta modificación, el Gobierno ha pretendido "clarificar" la aplicación en determinados ámbitos asegurando el objetivo de "controlar y restringir" el acceso a los productos del tabaco, indicó Salgado. Además, la titular de Sanidad subrayó que la exigencia de que los quioscos cuenten con una autorización administrativa permitirá controlar "con eficacia" el mercado. "No debemos olvidar que los quioscos de prensa se centran en el desarrollo de una actividad que podríamos calificar de servicio público y colaborar en el sostenimiento de esa actividad en un momento de profundos cambios en la forma de distribución de la prensa escrita, es ayudar al mantenimiento de esos servicios", agregó.
 
"Caja de truenos"
 
Por otra parte, señaló que los días y horarios de apertura de los quioscos, "en gran parte", no coinciden con los de otros puntos de venta de tabaco, y que, ante posibles problemas de logística, los fabricantes de máquinas expendedoras han asegurado que hay posibilidades técnicas y modelos adaptados perfectamente a esta necesidad.

Sin embargo, la senadora del PP María del Carmen de Aragón, que preguntó por los motivos del Gobierno para modificar la Ley Antitabaco, criticó a la ministra de abrir una "caja de truenos" con estos cambios, realizados –a su juicio– por "su propia contrariedad". También lamentó que Sanidad acusara a la Comunidad de Madrid de atentar gravemente contra salud de madrileños y el Parlamento español.

Las ideas "utópicas" de la Ley

Mientras Salgado comparecía en el Senado, Manuel Lamela, consejero de Sanidad de la Comunidad de Madrid, declaraba en una reunión informativa que el decreto de desarrollo de la Ley que prepara la Comunidad de Madrid se presentará en Consejo de Gobierno en los próximos días para su remisión al Consejo Económico y Social y al Consejo de Estado. Según Lamela, aunque es una Ley de cuya filosofía "todos participamos" y que era necesaria para transponer la normativa europea al ordenamiento jurídico español, el texto final ha incorporado ideas que en unas ocasiones son "buenas" y en otras "utópicas".

Lamela aclaró que el decreto regional,  "con respeto" a la Ley, intentará introducir en los "espacios" que quedan tres principios: anteponer los derechos de los no fumadores, garantizar espacios de libertad en los que el fumador pueda ejercer su derecho a fumar sin perjudicar al resto y dotar de seguridad jurídica a todos los afectados en el cumplimiento de la Ley.

Respecto a los cambios introducidos por el Gobierno el pasado 10 de febrero para que los quioscos de prensa con autorización administrativa puedan vender tabaco a través de máquinas expendedoras, indicó que no lo "entiende" y se preguntó por qué vender tabaco en máquinas es bueno y no lo es si el que lo vende es el quiosquero. El consejero añadió que "hay que ser serio cuando se legisla" y concluyó que con este tema le da "la sensación de que alguien ha perdido el norte".

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