Menú
"MATÉMOSLOS Y VAYAMOS A TOMAR UN CAFÉ"

Sicarios de la camorra napolitana ríen y cantan antes de una venganza frustrada

Los sicarios de la Camorra napolitana acuden tranquilos, riendo y cantando al lugar donde tienen previsto ejecutar a sus víctimas poco antes de disparar cientos de balas, como revela una grabación publicada por el diario La Repubblica.

Los sicarios de la Camorra napolitana acuden tranquilos, riendo y cantando al lugar donde tienen previsto ejecutar a sus víctimas poco antes de disparar cientos de balas, como revela una grabación publicada por el diario La Repubblica.

L D (EFE) El rotativo ha publicado la transcripción de las conversaciones de un comando de la Camorra, gracias a un micrófono escondido en uno de sus coches, momentos antes de llevar a cabo sus "venganzas", y se puede escuchar en la página de internet del periódico.

Uno de los integrantes del comando camorrista es Giuseppe Setola, considerado jefe del "brazo armado" del clan de los Casalesi, arrestado el pasado 14 de enero y a quien la Policía italiana buscaba desde hace tiempo bajo la acusación de asociación mafiosa y asesinato.

En el documento audio se puede escuchar cómo los sicarios entonan canciones napolitanas y bromean entre ellos, o cuando uno exclama: "Matémoslos y luego nos vamos a tomar un café". "¿Cuándo lleguemos a quién tenemos que matar?", pregunta con calma en dialecto napolitano uno de los sicarios, y otro le responde: "A los dos. Un tiro en la cara y nos vamos".

La grabación es del pasado 12 de diciembre cuando el comando intentó asesinar a Salvatore Orabona y a Pietro Falcone en la localidad de Tretonta Ducenta en Caserta (sur de Italia). Ambos tenían que ser "castigados" por no haber entregado parte de las extorsiones recogidas en el territorio que domina el clan de los Casalesi.

En el audio se escucha cómo los camorristas, que viajan en tres coches, disparan cientos de veces contra las casas de Orabona y Falcone, mientras gritan: "Sal, cornudo, se un hombre".

Setola, en la lista de los treinta criminales más buscados en Italia, fue arrestado el pasado 14 de enero, dos días después de que protagonizase una rocambolesca huida al escabullirse por las alcantarillas para evitar su detención.

A Setola, de 38 años y fugitivo desde el año pasado, se le atribuyen varios asesinatos, entre ellos la matanza en septiembre de 2008 en Castel Volturno (Caserta) de un italiano y seis inmigrantes africanos.

En Sociedad

    0
    comentarios