Menú

Un hombre con orden de alejamiento quema con ácido a su ex pareja y luego se bebe el líquido

Una mujer de 39 años resultó herida por quemaduras con ácido el viernes pasado en Collado Villalba tras ser agredida por su ex pareja, que luego bebió del líquido. Aunque pesa sobre el hombre una orden de alejamiento, la mujer le permitió la entrada a su domicilio. Según la Guardia Civil, la orden del juez habría surtido efecto si en vez de abrir la puerta la mujer hubiera llamado al 112.

L D (Agencias) Según informaron fuentes de la Comandancia de la Guardia Civil de Madrid, la agresión se produjo cuando la mujer, que había obtenido una orden de alejamiento para su ex pareja a mediados de diciembre, abrió la puerta de su domicilio a requerimientos del individuo.
 
Este último caso de violencia doméstica se produjo en la madrugada del viernes, según la Guardia Civil, en la urbanización El Soto de Collado Villalba, cuando un hombre, español, de 43 años, se presentó en el domicilio de su ex pareja, peruana, de 39, y le arrojó líquido abrasivo que posteriormente ingirió él mismo.
 
El instituto armado explicó que "cuando una víctima obtiene de un juez una medida cautelar de este tipo para su agresor, lo que debe hacer en cuanto sepa que éste ha quebrantado esta medida es avisar al 112 o a las fuerzas y cuerpos de seguridad, que procederán a la detención inmediata por quebrantamiento de orden judicial".
 
Estas fuentes insistieron en que "abrir la puerta puede ser una trampa mortal", mientras que, si se avisa al 112 o a los agentes de Policía o Guardia Civil, al pesar una orden judicial de alejamiento, la detención es inmediata y el agresor es trasladado al cuartel para después ser puesto a disposición del juez, informa El Mundo.
 
Fuentes de la Cruz Roja explicaron que la ambulancia de El Escorial trasladó a la mujer a La Paz con quemaduras de segundo grado en cara, cuello y tórax, mientras que otra ambulancia, la de la base de Galapagar, llevó al agresor al hospital de El Escorial, donde ingresó muy grave tras haber ingerido el líquido abrasivo.

Según la Guardia Civil, pesaba sobre el hombre una orden de alejamiento que le obligaba a mantener una distancia de al menos 200 metros de su ex pareja desde mediados de diciembre, tras dos denuncias cursadas por ella por malos tratos, por lo que pese a estar ingresado en la UCI, su condición es la de detenido.

Temas

En Sociedad

    0
    comentarios