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Un preso de la cárcel de Lérida escapa durante una visita programada al no llevar vigilancia policial

La dirección de la cárcel de Lérida ha suspendido de forma cautelar las salidas programadas de presos para revisar a fondo el protocolo y evitar que se repitan fugas como la protagonizada el pasado día 2 por Juan Carlos Hervás, condenado a 20 años y considerado peligroso. Al parecer, el recluso fugado iba acompañado sólo por educadores del centro penitenciario, sin ningún tipo de vigilancia policial porque la Secretaría de Servicios Penitenciarios no la consideró necesaria. No es la primera vez que se dan fugas en cárceles de Cataluña por motivos similares. El interno del centro penitenciario de Brians Juan Diego Redondo Puertas, autor del libro "La Fuga de los 45", no se presentó a su prisión tras disfrutar de un permiso ordinario de tres días.

La dirección de la cárcel de Lérida ha suspendido de forma cautelar las salidas programadas de presos para revisar a fondo el protocolo y evitar que se repitan fugas como la protagonizada el pasado día 2 por Juan Carlos Hervás, condenado a 20 años y considerado peligroso. Al parecer, el recluso fugado iba acompañado sólo por educadores del centro penitenciario, sin ningún tipo de vigilancia policial porque la Secretaría de Servicios Penitenciarios no la consideró necesaria. No es la primera vez que se dan fugas en cárceles de Cataluña por motivos similares. El interno del centro penitenciario de Brians Juan Diego Redondo Puertas, autor del libro "La Fuga de los 45", no se presentó a su prisión tras disfrutar de un permiso ordinario de tres días.

L D (EFE) La dirección del centro Penitenciario de Ponent quiere revisar a fondo el protocolo que se sigue para este tipo de salidas, al considerar que es necesario que los educadores cuenten con apoyo policial en el traslado de reclusos aunque se trate de agentes de paisano.

Los sindicatos de prisión han criticado que Justicia aprobara la salida de Hervás, que tenía fijada la libertad definitiva para el 2011, sin apoyo policial, al tratarse, además, de un recluso considerado peligroso y  ya han pedido la dimisión del responsable de estos temas en la dirección general de Servicios Penitenciarios de la Generalidad de Cataluña por la negligencia cometida.

Ahora, la policía autonómica busca a Juan Carlos Hervás, un peligroso preso que aprovechó el bullicio de un mercadillo cercano a la prisión para fugarse. Los dos técnicos creían que estaban apoyados por agentes de paisano, pero pronto se percataron de que no era así.

El preso, que cumple una condena de 20 años, huyó sin que lo pudiera evitar agente alguno. Hervás fue uno de los internos más activos en los motines vividos en la cárcel de Cuatre Camins.

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