Mientras el Real Madrid sigue con su concentración de pretemporada en Los Ángeles, cada vez es mayor el público que asiste a los entrenamientos en la Universidad de California.
Este miércoles, mientras los jugadores regresaban al Hotel Beverly Hills, se produjo una de las anécdotas de la jornada cuando uno de los buggys de golf en los que se mueven los jugadores blancos atropelló sin querer a una chica que cruzó la calle sin mirar.
Afortunadamente, el atropello no tuvo consecuencias más allá del susto que sufrió la joven.