Pau Gasol ha asegurado este jueves en Barcelona que sería una "catástrofe" con mayúsculas que se cancelara la temporada de la NBA, algo que, sin embargo, entendería como "un sacrificio necesario para mantener unas condiciones justas, no solo para los jugadores del presente, sino también para los del futuro".
El jugador de Barcelona cree que el acuerdo entre la patronal y el sindicato de jugadores aun está lejos -"aunque parezca que las posturas se han acercado, de un 53-47 a un 50-50% en el reparto hay 600 ó 700 millones de diferencia,", ha apuntado- pero no contempla, de momento, otro escenario que no sea el de jugar en la liga profesional estadounidense esta temporada.
"Sigo siendo optimista y estoy esperanzado en que al final esta situación se resuelva. Si te digo la verdad, ahora mismo veo difícil que pueda jugar en Europa esta temporada", ha manifestado en una rueda de prensa que se ha celebrado en el Palau Blaugrana minutos antes de saltar a la cancha para entrenarse con el Barcelona Regal junto a su hermano Marc.
Para Pau, vestir de nuevo la camiseta azulgrana mientras dure el lockout de la NBA, aunque sólo sea en los entrenamientos, era la opción más lógica: "Es algo que tiene mucho sentido para nosotros, porque es nuestro club de formación y vivimos aquí. Surgió esta posibilidad, el Barça accedió y estamos muy agradecidos al club por tener la oportunidad de poder entrenarnos con una de las mejores plantillas, sino la mejor, de Europa".
El objetivo, a partir de ahora, es "trabajar con seriedad y profesionalidad, mantenerse en forma y ritmo de juego" y, de paso, "ayudar a mantener la competitividad" de la plantilla del Barcelona Regal.
"Es una situación diferente, especial para nosotros, y también queremos disfrutar de este momento", ha explicado Pau Gasol, quien ha pactado unas condiciones especiales de trabajo con Xavi Pascual, técnico del conjunto azulgrana.
"En principio, participaré en todos los entrenamientos de la sesión de tarde y, en cuanto a los de la mañana, si tengo algún compromiso ineludible se lo comunicaré al técnico para que no cuente conmigo, porque Él tiene que saber con qué jugadores puede contar en cada entrenamiento", ha dicho.
Mientras tanto, esperará a que en Estados Unidos las negociaciones sigan su curso, con la idea de reincorporarse a la disciplina de los Lakers en cuantos se materialice un acuerdo entre la patronal y el sindicato de jugadores. "Vamos a ver qué sucede en las próximas semanas, pero estoy contento y orgulloso de que los jugadores no estemos dando el brazo a torcer en cuanto a las demandas y exigencias de nuestros equipos. En cuanto los propietarios estén dispuestos a firmar un acuerdo justo para todos, todos estaremos dispuestísimos a volver a la competición, que es lo que deseamos", ha señalado.
Si finalmente la temporada de la NBA se cancela por completo, al mayor de los Gasol le gustaría jugar en la ACB, a la cual considera "la mejor liga de Europa", y a poder ser en el Barcelona, club en el que se formó.
Ha explicado que tanto él como su hermano Marc tienen un seguro que les cubre en caso de lesión, así que no habría mayor problema para que volvieran a vestir la camiseta azulgrana. Eso sí, obviamente negociarían por separado.
Con el club catalán tendría la posibilidad de conquistar la Euroliga, una competición que nunca ha ganado y que le haría mucha ilusión lograr algún día, "y con el Barça más, claro", ha apostillado.
En ese caso podría llegar a medirse a Dirk Nowitzki, si finalmente el alemán de los Dallas Mavericks ficha por el Real Madridm, como se ha insinuado desde algún rotativo. "No he hablado con Nowitzki últimamente, pero está claro que lo que nadie quiere es estar una temporada absolutamente parado. A todos nos interesa competir y jugar en equipos de primer nivel", ha sentenciado Pau.