David Ferrer ha protagonizado la segunda sorpresa de la Copa Masters al derrotar al número uno del mundo, Novak Djokovic, en dos sets (6-3 y 6-1) y apenas hora y cuarto de juego. El español ya está en las semifinales del torneo.
Acudía con buenas sensaciones Ferrer al encuentro clave para él en la Copa Masters. Se enfrentaba al número uno del mundo después de conseguir una brillante victoria ante el ídolo local, Andy Murray, que había levantado su moral. Con el referente de aquel partido en el Masters de 2007 en el horizonte, Ferrer sabía cómo ganar a Djokovic.
Además, el serbio llega tocado a la última cita de la temporada. Su hombro está tocado desde la final del Abierto de Estados Unidos y en el primer partido del torneo, el checo Tomas Berdych ya le puso en graves apuros. Hoy se le ha visto cabizbajo, con algunos síntomas de agotamiento.
Sin embargo, del serbio nunca hay que fiarse y, de hecho, fue el primero en gozar de bolas de break en el cuarto juego del partido. Ferrer, casi sin cometer errores, se rehizo y fue él quien le devolvió la jugada en el séptimo juego. A partir de ahí, continuó con un juego sólido -sólo siete errores no forzados en la primera manga por 17 de su rival- para conseguir el primer set.
Un Djokovic irreconocible continuaba sufriendo y volvió a ceder bolas de break en el primer juego. Tras salvar dos, a la tercera fue la definitiva para el nuevo zarpazo del alicantino. El número uno del mundo también perdió el saque en el tercer juego, dejando en bandeja el partido para Ferrer, que no desaprovechó la ocasión.
De esta forma, Ferrer se apunta una gran victoria en dos sets y ya está en semifinales de la Copa Masters, torneo en el que ya llegó a la final en 2007. El viernes jugará un intrascendente encuentro ante Berdych, que se jugará su pase con Novak Djokovic, ya que ambos han ganado un partido.
El jueves, el turno será para el otro español, Rafael Nadal, que tiene que ganar a Jo-Wilfred Tsonga a partir de las 21:00 para meterse en semifinales.