El problema es que:
a) El tabaco, es perjudicial para la salud. A largo plazo su incidencia en numerosos tipos de cánceres es estadísticamente indiscutible. A corto plazo, produce un menor rendimiento del sistema respiratorio y del aporte de oxígeno al organismo.
b) El Sr. Fabio Coentrao es un deportista de élite al que se exige una capacidad física al límite.
c) La foto, como otras que han circulado, denota una relajación de la disciplina exigible en un deportista profesional que está ganando un pastizal garantizado por ley y contrato.
d) Sin perjuicio de lo anterior, el Sr. Coentrao en su casa hará lo que le dé la gana, pero en público no puede aparecer en una actuación impropia de un deportista profesional.
e) Con su actitud da mal ejemplo a los niños y jóvenes.
Dicho lo cual, que yo sepa, nadie ha pedido la cárcel para el señorito. El Madrid y su entrenador le han sancionado dejándole fuera de la convocatoria.
Por todo ello, pocos palos le han dado el figura este. Como decía el cura de la catequesis de confirmación, "si no eres casto, se cauto."
Se supone que un deportista de alto nivel que cobra una millonada se debe cuidar al máximo y además dar una imagen saludable.
Y si no, que se dedique a otra cosa.
No fumo, pero creo que a no ser que sea delito, todo el mundo fuera de su trabajo puede hacer lo que le de la real gana, además, también se sabe que en sus juergas los futbolistas (como todo el mundo) beben y nadie dice nada. Mi médico fuma y la dueña de la farmacia a la que voy también ....¿y?
Pues por la forma de coger el "cigarrillo", más bien parece un porro.
¡¡¡Demos la bienvenida a la Inquisición de los Habitos Saludables !!!
¿Desde cuando es delito fumar?
Pues desde que un atajo de irrascibles e intolerantes funcionarios y/tecnócratas han decidido que todo aquel que fume debe de ser enviado a las tinieblas exteriores, porque no está "inn", porque se pasa por el forro de su voluntad si debe de hacer caso a los que dicen que el cigarrillo mata, o no. Y es que los paladines de la Inquisición de los Hábitos Saludables no admiten desviaciones. Son como los ecologistas radicales: rabiosos, intransigentes e implacables...
Si en el contrato que firmó o en los estatutos del club se prohibe fumar a los jugadores, igual que se les prohibe la práctica de deportes de riesgo, el jugador se merece una sanción, por mínima que ésta pueda resultar.
¡Menudo ejemplo para la chavalería ...!