El Real Madrid se ha impuesto al Sevilla (3-0) en una mañana lluviosa y ha dado de esta manera un pasito más hacia el título de Liga, que podría conseguir esta misma noche si el Barcelona pierde ante el Rayo en Vallecas.
El Santiago Bernabéu recibió con aplausos a su equipo tras la reciente eliminación en la Champions League ante el Bayern de Munich y el equipo les premió con una nueva goleada, esta vez ante el equipo de Míchel, que dice casi adiós a todas las posibilidades de entrar en puestos europeos.
Cristiano abre la lata
El partido empezó con el Real Madrid apretando y presionando muy arriba pero el Sevilla tenía la lección bien aprendida. Jugar como el Bayern de Munich era lo que Míchel les había dicho a sus pupilos y éstos no dudaron en hacerlo así. De hecho, el primer susto para el equipo de Mourinho llegó a los cuatro minutos de juego, cuando Mateu Lahoz, colegiado del encuentro, anuló un gol al equipo andaluz por falta de Negredo sobre Pepe. La grada blanca enmudeció.
Tras este sobresalto, el Madrid se quito la presión de encima y comenzó a atacar. Özil, Di María, Cristiano y Benzema se pusieron las pilas y a los pocos minutos comenzaron las ocasiones. Granero, que hoy fue titular en la medular del campo junto con Xabi Alonso, tuvo la primera ocasión tras girarse bien en el balcón del área, pero su disparo pegó en un defensa sevillista y se fue a córner.
Las ocasiones de gol se sucedían. Özil, Cristiano y Benzema combinaban una y otra vez, pero el gol no acababa de llegar. El Sevilla buscaba a Navas repetidamente pero el capitán del Sevilla no tenía su día. A los 18 minutos de juego, una jugada muy bien trenzada por el Madrid acabó en los pies de Cristiano que primero recortó con la izquierda a Coke para luego fulminar a Varas con la derecha. Tras el gol, los locales se echaron un poco atrás y perdieron la concentración, lo que dio paso a las mejores ocasiones del equipo de Nervión.
Jesús Navas, en una contra, y Álvaro Negredo, en un mano a mano ante Casillas, tuvieron las ocasiones más claras del partido pero la pegada ha vuelto a ser clave. En el minuto 35, Cristiano Ronaldo lanzó un latigazo al palo tras un libre indirecto dentro del área. La primera parte acabó con un taconazo de Cristiano que no fue gol de milagro, en lo que recordó al tanto que marcó en Vallecas.
Doblete de Benzema
El delantero francés había tenido varias ocasiones en la primera parte pero no acertó en ninguna de ellas. Curiosamente, y nada más comenzar la segunda mitad, Benzema estuvo muy listo para pillarle la posición a Coke, que se confió en exceso, tras un centro de Di María. Míchel se lementaba desde la banda y el Bernabéu ya cantaba eso de "campeones, campeones".
Aún seguía cantando la grada madridista cuando en un contragolpe, en el que pedían falta los jugadores del Sevilla sobre Reyes, Ramos centro al área para que Benzema, de nuevo, rematase el balón al fondo de las mallas con un cabezazo en plancha. Partido cerrado y a pensar en San Mamés.
A partir de este tercer gol, festival de Mateu Lahoz, que comenzó a sacar amarillas a diestro y siniestro y cambios sin cesar. Xabi Alonso fue sustituido en el 75 por Albiol, que jugó de doble pivote.
Gran partido del Madrid, sobretodo en la segunda parte, y mejor partido de Benzemá, que día a día demuestra porque está por delante de Higuaín. El argentino ni siquiera ha salido a calentar y parece que su destino está muy lejos del Bernabéu.
Esta noche, el desenlace de la Liga está en Vallecas. Si el Rayo gana el Madrid volverá a La Cibeles para festejar un nuevo título.