(Libertad Digital) España tendrá que luchar otra vez por segundo año consecutivo por eludir el descenso del Grupo Mundial de Copa Davis. Esta eliminatoria se disputará del 22 al 24 de septiembre y en el sorteo, que se celebra el 12 de abril, estarán todos los equipos que han caído en la primera ronda del Grupo Mundial y a los que venzan en las respectivas zonas locales. El año pasado fue Eslovaquia quién echó al conjunto español y tocó sufrir para derrotar a domicilio a Italia en Torre del Greco (3-2).
España ha pasado en dos ediciones de ganar la Copa Davis a luchar por segunda vez consecutiva por mantenerse en el Grupo Mundial. Es la duodécima vez en la historia que tiene que pasar por este trago, convirtiéndose así en el equipo que más veces ha tenido que hacerlo del mundo. Desde que el Grupo Mundial se creó en 1981, el equipo español ha disputado la permanencia en 1982 (se descendió), 1985, 1986, 1988, 1990, 1992, 1993, 1995 (se descendió), 1999, 2001 y 2005.
Por su parte, Bielorrusia se enfrentará, del 7 al 9 de abril, en cuartos con el ganador de la eliminatoria que se disputa en Graz entre Suiza y Australia. Dos inspiradísimos Vladimir Voltchkov y Max Mirnyi en la jornada del viernes, se han vuelto a unir este sábado para dar al traste con las esperanzas españolas de volver a lo más alto en la Copa Davis. Emilio Sánchez Vicario y sus tenistas se habían conjurado para darle la vuelta al 2-0 de la jornada anterior y a en la primera oportunidad han vuelto a fallar. La pareja bielorrusa ha derrotado a la formada por Feliciano López y Fernando Verdasco por 7-6 (2), 6-4 y 7-5.
"Casi no nos hemos enterado"
Después del partido de dobles, Feliciano López resumía el batacazo con una sola frase: "Hemos perdido por 3-0 y casi no nos hemos enterado". Sobre la rápida pista de Minsk, los tenistas españoles han sido un juguete en manos de los bielorrusos. El 2-0 en contra con el que se acabó la primera jornada no invitaba al optimismo. España nunca había remontado una diferencia así. Además, Fernado Verdasco y Feliciano López debutaban como pareja ante otra que lleva jugando 21 veces juntos desde 1994.
No comenzaban tampoco bien entonados los españoles. Feliciano López falló mucho en el saque y tardó casi una hora en conectar su primer saque directo, a 230 kilómetros por hora. Pero es que salvo el primer set, cuando rompieron el servicio de Mirnyi en el 3-2 para recuperar el que 'Feli' dejó escapar antes en el 2-0, el doble español no tuvo ni la más mínima oportunidad.
Mirnyi desapareció y apareció en los momentos oportunos, pero el que sin duda ganó el partido fue Voltchkov, que no cedió ni una sola vez su saque en todo el encuentro, y dejó que le robaran únicamente siete puntos en toda la tarde, uno de ellos en el primer set, cuatro en el segundo y tres en el tercero. Fue un hallazgo que ha supuesto oro para el capitán Dmitri Tatur y una sorpresa para todo el equipo español que confiaba en la sabiduría de Mirnyi, número tres del mundo en esta especialidad, pero no en el sorprendente trabajo de la denominada "Pequeña Bestia".
La conexión española también falló al principio, pues los dos zurdos se estorbaban. Tardaron en acoplarse, y fue Verdasco, el que tiró de rabia para conservar su saque como podía hasta el último juego del partido, precisamente cuando en el anterior estuvieron a solo dos puntos de arrebatar el de Mirnyi y ganar ese parcial. Emilio Sánchez se desgañitó una vez mas. "Cerrad espacios, cerradlos", les gritaba continuamente, pero pocas veces la pareja española logró cruzarse y tapar huecos con la necesaria maña.
Mirnyi desapareció y apareció en los momentos oportunos, pero el que sin duda ganó el partido fue Voltchkov, que no cedió ni una sola vez su saque en todo el encuentro, y dejó que le robaran únicamente siete puntos en toda la tarde, uno de ellos en el primer set, cuatro en el segundo y tres en el tercero. Fue un hallazgo que ha supuesto oro para el capitán Dmitri Tatur y una sorpresa para todo el equipo español que confiaba en la sabiduría de Mirnyi, número tres del mundo en esta especialidad, pero no en el sorprendente trabajo de la denominada "Pequeña Bestia".
La conexión española también falló al principio, pues los dos zurdos se estorbaban. Tardaron en acoplarse, y fue Verdasco, el que tiró de rabia para conservar su saque como podía hasta el último juego del partido, precisamente cuando en el anterior estuvieron a solo dos puntos de arrebatar el de Mirnyi y ganar ese parcial. Emilio Sánchez se desgañitó una vez mas. "Cerrad espacios, cerradlos", les gritaba continuamente, pero pocas veces la pareja española logró cruzarse y tapar huecos con la necesaria maña.