La vuelta al equipo de Ricky Rubio se ha hecho sentir de inmediato en el juego de los Minnesota Timberwolves, que se han impuesto por 108-103 a los Atlanta Hawks.
Rubio jugó sólo 19 minutos en su primer partido después de haberse perdido cuatro por molestias en la espalda. Pero este tiempo ha sido más que suficiente para que el pívot montenegrino Nikola Pekovic se beneficiara de sus pases y consiguiera un doble-doble de 25 puntos y 18 rebotes, estableciendo su mejor marca como profesional en esta última faceta del juego.
Pekovic, que ha conseguido ocho dobles-dobles en los últimos 13 partidos que ha disputado, reconocía que la ausencia del ala-pívot estrella Kevin Love les había dado una motivación mayor para luchar y hacer las cosas mejor en el campo.
Rubio no hizo ningún tiro a canasta y anotó 4/6 desde la línea de personal, pero repartió ocho asistencias que lo dejaron como el líder del equipo en esa faceta del juego. También capturó un rebote y recuperó cuatro balones, que fueron decisivos.
El base de El Masnou se mostraba satisfecho al finalizar el partido, pero admitía que la verdadera prueba la tendrá este miércoles en el duelo que los Wolves disputarán ante los Oklahoma City Thunder de Kevin Durant y Serge Ibaka en el Chesapeake Energy Arena. "Pienso que va a ser una buena prueba para ver cómo responde mi cuerpo", destacó Rubio.
Los Timberwolves (16-15), que tienen la baja indefinida de Kevin Love por una fractura de la mano derecha, han logrado la victoria a pesar que en el banquillo tampoco estuvo su entrenador Rick Adelman, que se ausentó del equipo por razones personales.