
L D (EFE) "Para mí es mejor hacer la reflexión a final de temporada, aunque cuando las cosas no van bien a veces hay cambios", aseguró analizando un posible despido del técnico Fabio Capello.
Señaló que "cuando las cosas no salen bien no se cumplen los objetivos pero en esta temporada han sido doce los jugadores que se han marchado y no creo que sea positivo cambiar muchos jugadores. Hay buena plantilla, sabemos que pueden venir jugadores que enriquezcan y que otros que se marcharán. Es la ley del fútbol y a todos nos puede tocar".
Reflexionando sobre la eliminación ante el Bayern de Múnich, el capitán admitió, sin querer polemizar con la apuesta de Capello, que la entrada de Guti cambió al Real Madrid y tuvieron oportunidades para avanzar de ronda. "Cada vez que el entrenador hace un once es pensando que es bueno para el equipo. A los diez segundos se nos puso todo en contra y desde que salió Guti fue otro partido, el equipo reaccionó y durante muchos minutos manejamos el partido y pudimos pasar la eliminatoria. El entrenador es el responsable de hacer las alineaciones", dijo.
Aunque en el momento de repartir culpas Raúl situó en el primer lugar a los jugadores. "Nosotros hemos tenido siempre nuestra parte de responsabilidad. La situación que estamos viviendo no es fácil, hay muchas cosas que no se han hecho bien". "Todos somos culpables y los jugadores los primeros porque somos los que saltamos al terreno de juego. Nuestro rendimiento a lo largo de la temporada no ha sido bueno, el equipo ha luchado pero hemos dado una imagen que no corresponde a este club", admitió.
En la plantilla madridista ya se pasa página y se piensa en el encuentro del próximo sábado en el Camp Nou. El enfrentamiento ante el Barcelona es decisivo para Raúl y marcará las opciones reales del Real Madrid de luchar por el título. "Todos estamos en el mismo barco y estamos decepcionados pero el sábado tenemos un partido muy importante que nos puede meter en la pelea por la Liga y para intentar dar una alegría a nuestros aficionados", manifestó.
"Si no ganamos nos alejaría mucho de la lucha por el título, pero si sacamos algo positivo queda mucha Liga por delante. Sólo nos queda esta competición y estaríamos preparados para luchar por el campeonato. Si no es así, hay personas en el club que deben decidir. Aquí solo vale ganar y siempre se intentan cambiar cosas", agregó. Raúl mostró su espíritu de ganador al reconocer que no se conforma con cerrar la temporada acabando entre los puestos que dan acceso a Liga de Campeones.
"No firmaríamos ser cuartos en Liga. En mi cabeza está ser campeón. Sabiendo la dificultades que hay por delante con equipos muy fuertes a los que nos tenemos que enfrentar y medirán nuestras opciones de ganar". Por último, el capitán del Real Madrid destacó lo tocados psicológicamente que llegan los dos equipos protagonistas del clásico del fútbol español.
"Los dos llegamos tocados tras ser eliminados de la Liga de Campeones, un torneo al que aspirábamos. Ahora los dos tenemos que centrarnos en la Liga y el que juega en casa es siempre más favorito pero intentaremos que sea un partido de tú a tú, que no nos dominen, intentar tener la pelota como en fases de ayer cuando creamos más peligro", concluyó.
Aunque en el momento de repartir culpas Raúl situó en el primer lugar a los jugadores. "Nosotros hemos tenido siempre nuestra parte de responsabilidad. La situación que estamos viviendo no es fácil, hay muchas cosas que no se han hecho bien". "Todos somos culpables y los jugadores los primeros porque somos los que saltamos al terreno de juego. Nuestro rendimiento a lo largo de la temporada no ha sido bueno, el equipo ha luchado pero hemos dado una imagen que no corresponde a este club", admitió.
En la plantilla madridista ya se pasa página y se piensa en el encuentro del próximo sábado en el Camp Nou. El enfrentamiento ante el Barcelona es decisivo para Raúl y marcará las opciones reales del Real Madrid de luchar por el título. "Todos estamos en el mismo barco y estamos decepcionados pero el sábado tenemos un partido muy importante que nos puede meter en la pelea por la Liga y para intentar dar una alegría a nuestros aficionados", manifestó.
"Si no ganamos nos alejaría mucho de la lucha por el título, pero si sacamos algo positivo queda mucha Liga por delante. Sólo nos queda esta competición y estaríamos preparados para luchar por el campeonato. Si no es así, hay personas en el club que deben decidir. Aquí solo vale ganar y siempre se intentan cambiar cosas", agregó. Raúl mostró su espíritu de ganador al reconocer que no se conforma con cerrar la temporada acabando entre los puestos que dan acceso a Liga de Campeones.
"No firmaríamos ser cuartos en Liga. En mi cabeza está ser campeón. Sabiendo la dificultades que hay por delante con equipos muy fuertes a los que nos tenemos que enfrentar y medirán nuestras opciones de ganar". Por último, el capitán del Real Madrid destacó lo tocados psicológicamente que llegan los dos equipos protagonistas del clásico del fútbol español.
"Los dos llegamos tocados tras ser eliminados de la Liga de Campeones, un torneo al que aspirábamos. Ahora los dos tenemos que centrarnos en la Liga y el que juega en casa es siempre más favorito pero intentaremos que sea un partido de tú a tú, que no nos dominen, intentar tener la pelota como en fases de ayer cuando creamos más peligro", concluyó.
Metzelder en vez de Kaká, Robben y Cesc
El diario Bild ha publicado en la edición de este jueves que el Real Madrid ya tiene fichado al central del Borussia Dortmund Christoph Metzelder, justo un día después de la eliminación del equipo de la Champions y en el momento en el que Raúl, el capitán, apunta a los directivos para que asuman su gran parte de culpa. De momento, todavía no se ha filtrado nada sobre la prometida incorporación de Robben, Cesc y Kaká.