LD (Europa Press) Colonial, Chamartín, Fadesa, Metrovacesa, Nozar, Rayet, Realia, Restaura, Reyal Urbis, Vallehermoso, Renta Corporación, Hercesa y Parquesol constituyeron en octubre del pasado año este grupo, al que bautizaron G-14 Inmobiliarias por la Excelencia, con el fin de desarrollar "acuerdos y medidas que redunden en defensa de su actividad", ante la crisis que entonces comenzaba a aflorar en el sector. Entonces nombraron presidente a Fernando Martín.
Según sus estatutos, el objeto social del grupo es "la representación, promoción y defensa de los intereses profesionales tanto de las entidades inmobiliarias españolas cotizadas como de las no cotizadas que desarrollen una actividad significativa en el ámbito nacional e internacional, a fin de impulsar todo tipo de iniciativas técnicas, comerciales o de marketing que sirvan para favorecer la excelencia en la actividad inmobiliaria de sus socios".
Así, uno de los principales objetivos que se marcaron desde el principio fue explicar las "excelencias del sector e incrementar la confianza en el mercado inmobiliario tanto de los particulares como de los grandes fondos desinversión internacionales".
El G-14 pide al Gobierno que no abandone el sector a su suerte
Además, el lobby de las trece mayores inmobiliarias, ha solicitado al Ejecutivo que no se abandone al sector "a su suerte" y que se pongan en marcha medidas que "atenúen el problema de liquidez" que atraviesan las empresas para evitar un efecto "en cadena" que contagie a toda la economía y el empleo.
El grupo de inmobiliarias, del que forma parte Martinsa-Fadesa, considera que la situación que atraviesa esta empresa es consecuencia de la "crisis de liquidez" de la que, según asegura, ya había advertido.
"El G-14 ha venido alertando de una forma consistente y continuada de las consecuencias que la crisis de liquidez y el consiguiente cierre de la financiación tenían para la economía española en general y el sector inmobiliario en particular", recordó el grupo en un comunicado.
Por ello, insistió en la "necesidad" de que el Gobierno tome "medidas dirigidas a atenuar el problema de la financiación", con el fin de evitar el "efecto encadenado que este problema tiene sobre el funcionamiento de la economía española y la sostenibilidad de la actividad y el empleo".
Aportación del sector.
Además, el G-14 quiso "salir al paso" de quienes argumentan que el sector "debe dejarse a su propia suerte" asegurando que ya ha disfrutado de un largo periodo de crecimiento de la actividad y de beneficios.
Ante ello, la organización defendió que el sector inmobiliario "ha hecho partícipe a toda la economía española de esa larga etapa de fuerte actividad, que ha generado la quinta parte del crecimiento de la economía española en la última década y uno de cada tres empleos".
En la misma línea, el 'lobby' recordó que el sector "ha sido el primer contribuyente de las arcas públicas municipales, autonómicas y centrales, cuyos ingresos se han visto altamente beneficiados por este crecimiento de actividad".