LD (Agencias) El parón de actividad experimentado por el sector construcción desde el pasado verano, así como el actual panorama de desaceleración económica, han pasado factura a la producción de materiales de construcción, que ha caído en el primer trimestre del año un quince por ciento.
Así lo aseguró hoy el presidente de la Confederación Española de Asociaciones de Fabricantes de Productos de Construcción (CEPCO), Rafael Fernández, que afirmó que si esta desaceleración se mantiene hasta final de año supondría una pérdida de más de 35.000 empleos, el siete por ciento del total de empleo del sector de la producción de materiales.
Así lo aseguró hoy el presidente de la Confederación Española de Asociaciones de Fabricantes de Productos de Construcción (CEPCO), Rafael Fernández, que afirmó que si esta desaceleración se mantiene hasta final de año supondría una pérdida de más de 35.000 empleos, el siete por ciento del total de empleo del sector de la producción de materiales.
En cuanto a la producción de cemento mantiene su tendencia a la baja. En los tres primeros meses del año la producción de cemento ha caído un 11,7 por ciento, siendo especialmente pronunciado en el mes de marzo, con una caída mensual del 20,2 por ciento. En cuanto al consumo, desde enero hasta marzo ha descendido un 14,48 por ciento, en relación al mismo periodo del año anterior.
Desde CEPCO, Rafael Fernández ha indicado que el consumo de materiales de construcción ya experimentó "cifras negativas" en diciembre de 2007 y que en marzo ha sufrido retrocesos de hasta el 30 por ciento en ciertos sectores.
Explicó que en el sector de la producción de materiales ya se han comenzado a "sentir" los efectos de la "crisis" y que ésta "no ha hecho más que empezar". Tras expresar su "temor" e "incertidumbre" sobre el futuro del sector, mostró sus "esperanzas" de que las medidas económicas aprobadas por el Gobierno el pasado viernes puedan paliar los efectos de la desaceleración.
No obstante, criticó varias de ellas, como la deducción de 400 euros en el Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas (IRPF) para asalariados, pensionistas y autónomos, o la mejora en el tratamiento fiscal de la rehabilitación de edificios, porque consideró que "no conseguirán reactivar la demanda".
Fernández precisó que va a ser "muy difícil" que el "plan de choque" para emplear a los parados del sector de la construcción logre recolocar a estas personas, ya que entre ellas existe una enorme cantidad de personal inmigrante de escasa cualificación.
Explicó que espera poder reunirse próximamente con el Gobierno para proponerle algunas medidas que ayuden a reactivar la demanda.
Fernández también señaló que la confederación tiene previsto citarse con las ministras Vivienda y Fomento, Beatriz Corredor, y Magdalena Álvarez, y con el responsable del Ministerio de Industria, Miguel Sebastián, para que se aplique "de forma rigurosa" la Ley de Contratos del Estado, en la que se incluyen medidas de lucha contra la morosidad en las operaciones comerciales.
Según explicó en la industria de la producción de materiales de la construcción existe una demora de pago de seis meses, lo que supone, con una facturación de 50.000 millones de euros al año, una demora en la morosidad de 25.000 millones de euros anuales.
Además, el actual panorama de desaceleración económica ha hecho que los bancos "estén demorando los créditos", con el "riesgo" que ello conlleva para el sector. Cuestionó que la ralentización de la economía precise un cambio en el modelo económico español, ya que, a su juicio, "vender 50.000 viviendas es más productivo que exportar un millón de automóviles".
Explicó que en el sector de la producción de materiales ya se han comenzado a "sentir" los efectos de la "crisis" y que ésta "no ha hecho más que empezar". Tras expresar su "temor" e "incertidumbre" sobre el futuro del sector, mostró sus "esperanzas" de que las medidas económicas aprobadas por el Gobierno el pasado viernes puedan paliar los efectos de la desaceleración.
No obstante, criticó varias de ellas, como la deducción de 400 euros en el Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas (IRPF) para asalariados, pensionistas y autónomos, o la mejora en el tratamiento fiscal de la rehabilitación de edificios, porque consideró que "no conseguirán reactivar la demanda".
Fernández precisó que va a ser "muy difícil" que el "plan de choque" para emplear a los parados del sector de la construcción logre recolocar a estas personas, ya que entre ellas existe una enorme cantidad de personal inmigrante de escasa cualificación.
Explicó que espera poder reunirse próximamente con el Gobierno para proponerle algunas medidas que ayuden a reactivar la demanda.
Fernández también señaló que la confederación tiene previsto citarse con las ministras Vivienda y Fomento, Beatriz Corredor, y Magdalena Álvarez, y con el responsable del Ministerio de Industria, Miguel Sebastián, para que se aplique "de forma rigurosa" la Ley de Contratos del Estado, en la que se incluyen medidas de lucha contra la morosidad en las operaciones comerciales.
Según explicó en la industria de la producción de materiales de la construcción existe una demora de pago de seis meses, lo que supone, con una facturación de 50.000 millones de euros al año, una demora en la morosidad de 25.000 millones de euros anuales.
Además, el actual panorama de desaceleración económica ha hecho que los bancos "estén demorando los créditos", con el "riesgo" que ello conlleva para el sector. Cuestionó que la ralentización de la economía precise un cambio en el modelo económico español, ya que, a su juicio, "vender 50.000 viviendas es más productivo que exportar un millón de automóviles".