LD (EFE) Aunque un 82 por ciento de los encuestados atribuyen la principal responsabilidad a los bancos comerciales y de inversiones, un 74 por ciento echa también la culpa a los bancos centrales frente a un 70 por ciento que opinaba así el pasado octubre.
Incluso los inversores que especularon a la baja son considerados menos responsables de lo ocurrido que los bancos centrales: Poco más de un 60 por ciento los culpan de la crisis. Siguen en orden decreciente de responsabilidad los líderes políticos, con algo más de un 60 por ciento, reguladores financieros (menos de un 60 por ciento), agentes de la propiedad (ligeramente por encima del 40 por ciento), constructores (menos de un 40 por ciento) y compradores de viviendas (en torno a un 30 por ciento).
El sondeo indica también el apoyo creciente de los ciudadanos a la imposición de límites a los ingresos de los ejecutivos de los bancos controlados por el Estado. En torno a un 85 por ciento de los alemanes y los españoles y ligeramente menos franceses y británicos, más de un 70 por ciento de los estadounidenses y casi un 65 por ciento de los italianos apoyan esa idea.
Origen: Tipos de interés muy bajos
Los expertos del Banco Central Europeo han terminado por reconocer que se mantuvieron demasiado bajos los tipos de interés durante un tiempo excesivamente largo aunque echan principalmente la culpa a la Reserva Federal de Estados Unidos.
El sondeo indica también que hay un apoyo creciente a la idea de que los bancos deberían parecerse cada vez más a las Sparkassen (cajas de ahorro alemanas) controladas por el sector público y más dedicadas al servicio de las comunidades e industrias locales.
En España y Alemania se registró el mayor apoyo a esa idea -un 85 y un 83 por ciento respectivamente- mientras que las cifras correspondientes a Gran Bretaña y Estados Unidos son 81 y un 78 por ciento.
El sondeo de FT/Harris, llevado a cabo entre 6.237 adultos de varios países europeos y EEUU, entre finales de enero y el 5 de febrero, indica también un fuerte respaldo popular a la propuesta de reforzar la regulación de los bancos comerciales . Más de un 60 por ciento de los británicos y más del 70 por ciento de alemanes, españoles e italianos están a favor de un mayor control de ese sector por los gobiernos.