En su primer turno de réplica, la vicepresidenta segunda del Gobierno ha hilado un discurso pausado en el que ha ido contestando y atacando al líder de la oposición Mariano Rajoy, a quien ha acusado de ser "previsible" y de no haber preparado el debate por tener que "encontrar tiempo entre sus múltiples ocupaciones".
Para Mariano Rajoy, en cambio, que le tachen de previsible es algo que le honra porque "todos saben que yo controlaría el déficit público, porque todo el mundo sabe que yo trabajaría para acabar el paro, porque la previsibilidad es la condición más importante que ahora necesita la economía española".
Frente a esto, Rajoy denuncia que "el gran problema que tiene hoy España es que quien encabeza el Gobierno es absolutamente imprevisible y es una máquina de generar desconfianza".
Salgado ha insistido en que sus previsiones son ajustadas a la realidad y en que el déficit exterior se ha reducido a la mitad al mismo tiempo que aumenta la competitividad exterior. Rajoy le volvería a corregir en este sentido en su réplica: "Se pongan como se pongan, las exportaciones han bajado un 20%", decía.
Por otro lado, Salgado insiste en que el Gobierno de Zapatero se ha limitado a hacer lo mismo, en materia económica, que los países del G-20 mientras que el PP "lo que dicen que hay que hacer es justo lo contrario, porque lo que les interesa es la descalificación y la vuelta al pasado, al siglo pasado, cuando ustedes gobernaban".
En cambio, para el líder de la oposición se ha mostrado extrañado de estas declaraciones y ha pedido a Salgado que repase la tasa de paro del resto de países del G-20 y la que tiene España. Por otro lado ha señalado que sí quiere volver al pasado "si volver al pasado es coger un gobierno con el 22% de paro y que la deja en el 11%, y no coger un gobierno con el 11% de paro y llevarlo al 19% como tenemos ahora, de momento".
Gasto público y déficit
Por otro lado, Salgado ha reconocido que el Gobierno ha incrementado el gasto público, la deuda y el déficit porque "estamos convencidos de que estas políticas económicas son las que permiten salir de la crisis", frente a las políticas "neoconservadoras" que, según ha dicho Salgado, defiende el PP.
Además, le ha pedido al líder de la oposición que revise el nivel de deuda pública de alguna administración autonómica como "comunidad valenciana" que es una de las más endeudadas de España.
Reformas, pensiones y despido
La vicepresidenta del Gobierno ha acusado al presidente del PP de querer abaratar el despido y de meter miedo a los españoles con las pensiones, "no hay ningún riesgo para nuestras pensiones, no intranquilice a los millones de pensionistas que nos pueden estar escuchando", le ha pedido Salgado.
Además, le ha pedido al líder de la oposición que explique de dónde recortarían el gasto público, "no tengan miedo, porque el Gobierno les queda muy lejos, y los españoles no se van a asustar de lo que digan", desafiaba salgado.
En su réplica, Rajoy le ha insistido en que "no la responsabilizo a usted de la política económica, responsabilizo al señor Zapatero". A continuación, recordaba que "durante el gobierno socialista en el año 1992 y 1993 se aprobaron dos decretos leyes para abaratar el despido, y ninguna el PP".
Además, contestaba que su partido no ha hecho "política con las pensiones" pese a que Zapatero "se va a Rodiezmo todos los años para hacer política con las pensiones". Por el contra, Rajoy reclama "reformas, que es lo que no han comprendido ustedes, lo que hay que hacer es la reforma del pacto de Toledo".
"Están hundiendo a quienes tienen que crear empleo"
Hacia el final de su intervención y con un tono mucho más duro que la primera vez que subió al estrado, Mariano Rajoy exclamó que no votaría los presupuestos "porque aumentan el déficit, la deuda pública que provocan, entre otras cosas, que el grueso del crédito lo estén recibiendo la administración".
Según ha explicado Rajoy, "el crédito a la administración ha aumentado en 92.000 millones", mientras los créditos a empresarios y contribuyentes disminuyen. "Están ustedes hundiendo a quienes tienen que crear actividad, riqueza y empleo", exclamaba Rajoy.
Las Razones para el rechazo
Rajoy ha resumido sus razones para rechazar los PGE porque "estamos en contra de las subidas de impuestos, porque son letales para España y porque son una chapuza letal para las clases trabajadoras y las clases medias".
"Es posible que le queden muchos años para debatir con Zapatero, o no"
En clave más política y en su última intervención, Salgado acusó a Rajoy de "falta de respeto" por no querer debatir con ella, sino con Zapatero. "Es posible que le queden muchos años para intentarlo, o no".
Tras destacar lo "previsible" del discurso del presidente del PP, Salgado dijo que "ha dicho mucho adjetivo y poco argumento sustantivo, y mucha falta de respeto". A renglón seguido, le espetó a Rajoy: "No se por qué quiere debatir con el señor Zapatero, ha perdido diez veces. Tendrá que seguir intentándolo y es posible que le queden muchos años por delante para intentarlo, o no. Hoy le toca debatir comigo, se que no le gusta pero así son las cosas".
Reprochó a Rajoy que ha "aderezado" la tarde con "un montó de datos y porcentajes para ocultar que no tienen ustedes ni una sola idea, que no hacen ni una sola propuesta". Calificó el discurso de la oposición de "demagógico porque la crisis es la palanca que pretenden les lleve a la Moncloa y usted quiere que haya ciris para conseguir lo que no ha sido capaz de conseguir en otro momento".
Finalmente, Salgado dijo que a España le ha afectado la crisis internacional con otros dos factores, como el desplome de la construcción y la destrucción de empleo. "Pero tiene otro factor de riesgo que no tienen otros países, el comportamiento de la oposición. Nunca es tarde para rectificar. Al PSOE le ha tocado impulsar reformas importantes en este país y ahora nos corresponde liderar el cambio del sistema económico. No pierda también ese tren para apuntarse a las reformas del futuro".
Recado al PNV
El líder de los populares no ha evitado alusiones al PNV y a Coalición Canaria por haber mostrado su respaldo al proyecto presupuestario, un proyecto en el que ambos partidos, a su juicio, "no creen", de modo que lo apoyan por "intereses particulares" desconocidos.
Pero tales críticas las ha centrado en los nacionalistas vascos, si bien no ha mencionado sus siglas.
Porque si antes, ha dicho, denostaron los Presupuestos para 2010 "lúcidamente", ahora "los bendicen" porque el País Vasco "obtendrá algún beneficio", y eso a pesar de que "cuesta trabajo entender los beneficios" de unas cuentas públicas que provocarán un crecimiento del paro tanto "en Murcia como en Bilbao".
Por todo ello, Rajoy ha sentenciado que el Gobierno, "una vez más", ha concebido la preparación de los Presupuestos como "un trámite" en el que "sólo importa contar con los votos suficientes para salir del paso".