El presidente del BCE señaló que algunos elementos de la economía mundial son "expansionistas", lo cual, en su opinión, ofrece "un rayo de esperanza, aunque siempre con cautela".
Asimismo, subrayó que los inversores y agentes del mercado subestiman el posible impulso a la economía que podría provenir de los menores precios del crudo y de las materias primas, de los paquetes de estímulo fiscal y de las decisiones en materia de política monetaria adoptadas recientemente.
En este sentido, destacó que los efectos de unos precios del crudo más bajos deberían ser "sustanciales". Trichet explicó que los banqueros presentes en este encuentro han coincidido en que la actividad económica sigue ralentizándose.
Además, afirmó que los flujos del comercio internacional han sido particularmente flojos y añadió que en parte se ha debido al estado de los mercados financieros y no sólo a la ralentización económica.