LD (EFE) López, nacido en Ciudadela y consejero del Banco de España, efectuó estas manifestaciones en un ciclo de tertulias que organiza el Partido Socialista de Menorca. El tema que abordó Guillem López fue "La situación económica y financiera. La importancia del momento". Expuso un escenario de crisis y afirmó que se prevé que la situación toque fondo después del verano del 2009.
López Casasnovas dijo que el espíritu empresarial y el capital social deben crecer para afrontar la nueva realidad, lo que implica la integración de la población inmigrante y una buena formación académica.
Pese a los informes y organismos internacionales que advierten de que España es uno de los países más expuestos se encuentran a la crisis financiera internacional, para López Casanovas "el alarmismo no ayuda en absoluto" ya que estima que "el Estado español no es de los que presenta los indicadores más preocupantes a nivel europeo", subrayó.
La descripción del contexto económico de los últimos años, enmarcado en la sociedad del bienestar, apuntaba claramente a una crisis tarde o temprano, dijo Guillem López, "pero mientras el bienestar ha durado no se han puesto las herramientas para afrontar esta nueva situación".
"Aún así, el final de una sociedad que se sustenta en créditos e hipotecas no podía ser muy esperanzador. En un mundo globalizado, las consecuencias de todo esto se generalizan y el alcance crece", añadió.
López no describió la globalización como un hecho determinante ni perjudicial, "siempre y cuando -dijo-, la sede y el núcleo de las empresas se mantenga en la ciudad de origen".