Menú

Brad Pitt y Angelina Jolie no se casarán hasta que EEUU reconozca el matrimonio gay

                      (Volver)

punt dijo el día 27 de Septiembre de 2011 a las 15:27:08:

[Grady_Co] Por lo demás, creo que habrá visto que también soy partidario de las puyas, ironías y demás armas incruentas que amenizan los desencuentros propios del debate.

Así pues, celebro que no busque faltarme al respeto, del mismo modo que espero que entienda que tampoco yo persigo faltarle a vd.

Al fin y al cabo, parto de la base de que todas las personas son dignas del máximo respeto en tanto tales personas. Son los actos de esas personas o las ideas (o ideologías) que exhiban o defiendan los que no merecen respeto por sí mismas sino que tienen que ganarse ese respeto por sus méritos.

Los actos deben estar inspirados por el bien, tanto personal como común, de modo que no me verá defender ningún acto que pretenda ser lesivo ni para quien lo comete ni para otras personas, ni ninguno que, sin pretender causar daño, lo vaya a causar con toda seguridad. Ante un acto dañino involuntario puede mostrarse indulgencia, pero no aprobación.

Las ideas o ideologías, por su parte, no solo deben tener esa misma inspiración (sólo faltaba que aprobase las ideologías que busquen causar daño) sino que, como estructuras de pensamiento, también cabe exigirles un mínimo de veracidad, honradez, coherencia o realismo. Ideologías que se basen en falsedades, que busquen el engaño mediante añagazas, faltas de una mínima coherencia lógica o utópicas, alejadas de la realidad, tampoco pueden merecer mi aprobación: podré comprender que haya quien sea engañado por ellas, ya que si se extienden es porque tienen alguna capacidad de seducir, pero no las aprobaré y las combatiré sin tregua.

Finalmente, por si no se ha dado cuenta, las ideologías degeneradas (de género) caen completamente dentro de esta última categoría: se basan en falsedades, actúan manipulando el lenguaje buscando engañar, carecen de coherencia y lógica interna y buscan una utopía que se da de tortas con la realidad, utopía que, encima, imponen por la vía de los hechos consumados o por la vía de la promulgación de leyes inicuas orientadas a la manipulación, a la ingeniería social.

Por cierto, también son ideologías del odio desde el momento en que adoptan la dialéctica marxista, originalmente sobre la lucha de clases, a la lucha de sexos (o de tendencias sexuales), decretando el odio y la guerra entre ellos.

Naturalmente, como tales ideologías falsas y perniciosas, jamás contarán con mi aprobación (menos aún con mi apoyo).

Un saludo.

punt dijo el día 27 de Septiembre de 2011 a las 15:04:38:

[Grady_Co] Lo de la Edad Media no radica en si había más o menos libertades sino en el sentido común de los legisladores. En aquella época el legislador traducía la Ley Natural a Ley Humana situándose en el humilde lugar de un traductor, de modo que lo que se legislaba respetaba la naturaleza de las cosas porque provenía de esa misma naturaleza. Por el contrario, actualmente prima la dictadura de las mayorías que sitúa al legislador en el lugar de un dios que, con suficientes votos, puede legislar sobre lo que es verdadero o falso, sobre lo que es bueno y malo, conduciendo a la promulgación de aberraciones como la que nos ocupa, que en la Edad Media jamás hubieran tenido cabida por repugnar al más elemental sentido común.

En cuanto a las libertades individuales, no veo que la inexistencia de matrimonio homosexual vulnere ninguna libertad individual. ¿Se les prohibe convivir si quieren? No. ¿Se prohibe a un homosexual casarse con una mujer, o a una lesbiana con un hombre? Tampoco. Aquí no hay discriminación ninguna ni hay "seres humanos de primera y de segunda": todos tienen el mismo derecho a acceder al matrimonio dentro de las condiciones que definen a dicha institución y no fuera de ellas. Quien quiera transgredir esas condiciones se sitúa fuera él solito.

Así, vd. confunde una libertad legítima como es convivir con la promulgación de leyes específicas para privilegiar legalmente ese tipo de convivencia.

Pero le veo venir: ahora estará pensando que si considero que esas leyes privilegian a las parejas gays, también debe ser privilegio cuando son matrimonios. Si he así quedará demostrada su ignorancia ya que la institución matrimonial no está especialmente protegida por el romántico embeleso de la pareja sino porque es ahí donde nacen y se educan las nuevas generaciones: "matrimonio" viene de "mater" (madre) y, como institución, sólo puede referirse a la pareja fértil, que sólo puede ser la formada por un hombre y una mujer (por favor, no haga gala de su previsible demagogia con los matrimonios sin hijos, que eso está ya muy visto).

Así pues, veo que vd. confunde churras con merinas al considerar iguales a las familias verdaderas y a las parejas gays, cosa que no son ni por asomo. Sólo así se entiende su disparate sobre lo iguales que son las parejas homosexuales y los matrimonios.

Y sólo así se entiende que considere que si A="matrimonio" y B="sinsentido" deduzca que A=B.

Destila vd una lógica aplastante, oiga.

Un saludo.

Grady_Co dijo el día 27 de Septiembre de 2011 a las 13:14:16:

En primer lugar, me disculpo por la falta de ortografía. Y dale con la Edad Media, que si, que una época fascinante de la historia, pero estamos hablando de libertades individuales coño, y en la sociedad estamental de la Edad Media dígame cuáles tenían (al menos el mayoritario tercer estamento), y más refiriéndonos a temas sexuales. En épocas históricas anteriores en esos aspectos hubo sociedades más avanzadas. No le discuto logros de la época ni nada parecido, no me insulte dudando de mis conocimientos. Seguramente por edad y estudios tendrá más que yo, pero mis referencias no se limitan a tebeos y películas.

Sigamos con lo nuestro: eso de que mi postura busca la igualación machacando la igualdad es un disparate, es negar que la relación en una pareja homosexual no es igual a todos los efectos de convivencia que el de una pareja heterosexual. Los motivos que llevan a una pareja heterosexual a unirse son los mismos que los de una pareja gay. Esa es una parte de la realidad que ha obviado. El amor que sienten dos personas del mismo sexo es exáctamente el mismo que el de dos personas de sexos diferentes. A tales efectos, su unión debe tener los mismos efectos legales. Por eso creo que A = B. Lo contrario supone colocar a unos en la cúspide de la pirámide y tratar a otros como si fueran seres humanos de segunda. Veo que el problema ya no está referido únicamente al término "matrimonio", ya que hemos visto que estamos de acuerdo a que cualquier unión que no sea entre personas de sexos diferentes debe denominarse de otra manera (pura semántica, nada más). Dígame, ¿la única merma de derechos que le negaría a una pareja homosexual estaría referida a la posibilidad de adoptar o criar un guaje? Si ese es el único punto que le molesta, puedo entenderlo aunque yo no lo vea así.

Antes de continuar también quería dejar claro que a pesar de la discusión con sus puyas, desencuentros y demás, no me gustaría que pensase que me dirijo a usted faltando al respeto o que por no opinar igual no le tengo el debido respeto.

punt dijo el día 27 de Septiembre de 2011 a las 11:34:20:

[Grady_Co] El que sigue yéndose (con i griega, hombre) por peteneras es vd, que sigue sin justificar por qué una realidad a todas luces diferente tiene por qué tener efectos jurídicos iguales.

Mi postura es la lógica, la que respeta la igualdad: realidades iguales tienen efectos iguales y realidades diferentes tienen efectos diferentes. La "Justicia" es el "afán constante y perpetuo de dar a cada uno lo suyo" (definición dada por Ulpiano, jurista romano). Ese "dar a cada uno lo suyo" significa respetar tanto la igualdad como la desigualdad, respondiendo por igual ante lo que es igual y de distinta forma ante lo que no lo es.

Su postura es la aberrante, la ilógica, la que busca la igualación machacando la igualdad: para vd, realidades diferentes deben por fuerza y contra toda lógica tener efectos iguales.

Así pues, no soy yo sino vd quien debe justificar su postura, quien debe aportar argumentos convincentes de por qué realidades diferentes como un "matrimonio" y un "no matrimonio" (tan "no matrimonio" que es un "sinsentido" hablar de él en esos términos) deben tener efectos legales exactamente iguales.

Por descontado, yo defiendo que no sólo no son lo mismo sino que además, siendo realidades diferentes, no pueden tener efectos legales iguales. Como forma de convivencia, puedo conceder que se les reconozca algún tipo de protección para ellos en tanto pareja y de reconocimiento de algunos derechos adquiridos recíprocamente, pero en absoluto los efectos legales de un matrimonio verdadero, que deben ser de mayor calado y abarcar no sólo a la propia pareja sino también a los hijos que surjan de ella.

¿Lo quiere más claro? Mi postura es:
Si A <> B, entonces consecuencias(A) <> consecuencias(B)

¿Sería vd. capaz de argumentar por qué debe ser válido que:
Si A <> B, entonces consecuencias(A) = consecuencias(B) ?

Pero con lógica y argumentos, no con dogmatismo y buenismo progre. Vamos, que "=" signifique "igual a" y no "igualado a".

Y sobre la Edad Media, sigue revolcándose en su propia ignorancia. Imagino que si sus clichés no son los de Hollywood, serán los de los tebeos o los de la Leyenda Negra, porque desde luego Historia seria no es.

Un saludo.

Grady_Co dijo el día 26 de Septiembre de 2011 a las 21:09:51:

Si llamo "sinsentido" a la gay es por el motivo del que llevamos discutiendo hace rato, que el matrimonio es entre hombre y mujer, por lo tanto matrimonio gay no tiene sentido. Eso es algo que en ningún momento he puesto en duda. Usted sigue llendo por peteneras, diga de una vez claro y sin rodeos cuál es el problema que usted ve en la unión homosexual en igualdad de derechos y reconocimientos que la heterosexual sin que se le denomine "matrimonio". Vamos a ver si realmente sólo le molesta la semántica del término matrimonio o el hecho de que parejas del mismo sexo tengan igual reconocimiento que un matrimonio, dígalo hombre, no de más vueltas. Qué problema ve usted en que dos personas que se quieren tanto como cualquier pareja heterosexual y llevan compartiendo su vida durante años puedan tener a todos los efectos un reconocimiento como el del matrimonio. Y mi visión de la edad media nada tiene que ver con clichés de Hollywood, ahí ha jugado usted a adivino. La libertad individual en cualquier ámbito en esa época (por supuesto el sexual incluido) dejaba bastante que desear, ¿o eso también me lo va a discutir?

punt dijo el día 26 de Septiembre de 2011 a las 20:05:05:

[Grady_Co] Efectivamente, quienes formalizan matrimonios cuya naturaleza real no se corresponde con la de la institución a la que se adscriben, atentan contra ésta (confío en que no pretenda situarme a favor de los matrimonios fraudulentos, porque no termino de entender su enfoque sobre este punto concreto, cómo se supone que las ilegalidades que se consuman por no haberse detectado apoyen su punto de vista).

Como digo, esos matrimonios fraudulentos atentan contra la institución matrimonial, y lo hacen exactamente igual a como atentan contra ésta los homosexuales que pretenden formalizar sus uniones como si fueran matrimonios sin corresponder la naturaleza de ese tipo de uniones con la de la institución a la que pretenden adscribirse.

Pero hay una diferencia que vd pasa por alto entre un matrimonio fraudulento entre hombre y mujer y uno entre personas de igual sexo (que siempre será fraudulento, incluso cuando haya leyes ilegítimas que lo den por bueno): en el caso de un casamiento fraudulento entre hombre y mujer, el hecho fraudulento no radica en el hecho de que sean un hombre y una mujer sino en otras circunstancias que concurran en ese caso particular. En cambio, si van dos hombres o dos mujeres, eso ya constituye en sí mismo un hecho fraudulento respecto a la naturaleza de la institución matrimonial.

En fin, celebro que desde su retrógrada postura reconozca la mía como más avanzada que la medieval (unos mil años más avanzada, dicho sea grosso modo). De hecho, demuestra su ignorancia al despreciar el inmenso dinamismo social y cultural de la Edad Media, imagino que influenciado por los pueriles clichés de Hollywood.

Para ir finalizando, debería justificar vd. por qué parte del axioma de que realidades que vd. mismo reconoce como diferentes (incluso llama "sinsentido" a la gay) deben gozar de exactamente los mismos efectos legales. Lo obvio es que, al ser diferentes, deben tener efectos legales diferentes. Así pues, parte de un dogma ajeno a la realidad y, como ésta no se ajusta a su dogma, carga contra la realidad.

Por cierto, sobre la realidad de este debate en EEUU (que SÍ gira en torno a la institución matrimonial), puede consultar los artículos de Luís del Pino al respecto (son cuatro, enlazo el primero y puede pasar a los siguientes con los enlaces de cabecera; por cierto, no son consecutivos):

_http://blogs.libertaddigital.com/enigmas-del-11-m/el-matrimonio-homosexual-en-california-i-6749/

Infórmese, hombre.

Un saludo.

Grady_Co dijo el día 26 de Septiembre de 2011 a las 17:25:00:

El Código Penal prohíbe los matrimonios fraudulentos y no por ello dejan de producirse, muchos de ellos sin ser detectados, con lo que según su punto de vista imagino que también se está desprestigiando el matrimonio. Me alegra leer que usted no se oponga a un "cierto reconocimiento" de su condición de pareja de hecho, ya es algo más que en la Edad Media durante la que tanto se avanzó según usted. Capto de sobra que "matrimonio homosexual" es un sinsentido, pero no creo que dos personas del mismo sexo para unirse y tener un reconocimiento como pareja tengan que ir al notario a hacer un contrato, por la puerta de atrás. Deben poder oficializar o como quiera llamarlo usted su relación en el judgado o ayuntamiento como todo quisqui que no quiera casarse por la Iglesia, y tener los mismo derechos como pareja que un matrimonio. Volvemos a lo mismo, la discusión semántica se convierte en cortina de humo. No será un matrimonio, pero otra acepción debería tener los mismos resultados a todos los efectos. El titular de la noticia dice que piden que se reconozca el "matrimonio gay" en EEUU. Insisto, investigue usted si en el idioma inglés el término provoca las mismas discusiones que en español. E infórmese sobre los grupos que en ese país están en contra de la unión entre homosexuales, y verá que nada tiene que ver con el término "matrimonio". Igual que en España muchos se oponen independientemente de que lo llamen matrimonio o cualquier otra cosa.

punt dijo el día 26 de Septiembre de 2011 a las 16:46:08:

[Grady_Co] Eso está bien: hablar con propiedad y llamar a las cosas por su nombre, empleando nombres distintos para cosas distintas es "hacer malabarismos".

En cambio, imagino que lo serio y cabal debe ser preparar un "totum revolutum" en el que todo se confunde, donde no se sabe de qué se habla porque tan pronto se refieren a una persona o a una ideología, o porque tan pronto se refieren a una institución o a un acuerdo particular.

Así pues, tomando por cierto que vd "capta de sobra las connotaciones de 'matrimonio homosexual'", y descartada su ignorancia al respecto, sólo puedo deducir que opta por apoyar la demolición ideológica degenerada de la institución matrimonial empleando para ello, entre otras cosas, la manipulación del lenguaje, abyecta herramienta de ingeniería social.

Deduzco esto ya que le he dado mis explicaciones y las desprecia tildándolas de "requiebros" (pero... ¿sabe vd lo que es un requiebro?) y malabarismos. Queda claro que vd no quiere debatir honradamente, lo que exige tratar de entender lo que los demás le queremos decir (en lugar de rebatir lo que yo digo, es más fácil meterse a rebatir lo que vd dice que yo digo, que no es lo que yo digo).

Así pues, me temo que no hay nada más que decir sobre el tema: se ha retratado vd solito como demagogo que no solo demuestra una ignorancia enciclopédica sobre el tema del que discute sino que también se arroga la facultad de reescribir lo que los demás dicen y que, finalmente, no es capaz de acudir a nada más sólido que el manido y falaz juicio de intenciones (por el que toda su argumentación se reduce a un "lo que vd realmente quiere es...", en su caso un "seguir negándose a la unión entre homosexuales" que, como falaz que es, hace oidos sordos a mi "no niego que haya homosexualidad ni trato de impedir su convivencia si ellos quieren vivir así. Incluso no me opongo a que haya un cierto reconocimiento civil de su condición de pareja de hecho, cosa que pueden perfectamente conseguir firmando un contrato entre ellos")

Para terminar, por si no hubiese dejado clara su propia ignorancia, dice vd esta memez: "La gente que se casa con fines fraudulentos también desprestigia la "institución" del matrimonio y no por ello se prohíbe".

Sepa vd. que la Ley sí prohibe los matrimonios fraudulentos, tanto en el Código Penal (donde se centra más en la bigamia) como en el Civil (que establece los requisitos para casarse). Gracias por ese argumento que me da la razón.

Un saludo.

alamut dijo el día 26 de Septiembre de 2011 a las 15:56:42:

yo solo digo una cosa, brad pit es guapiiisiiiiimo, si es tonto listo casado o soltero me importa un pimiento, es mas, los guapiiiisiiiiimos estan mejor callados, total pa deleitar la vista no hace falta ser una lumbrera, en fin...juas a mi plin lo que diga

Grady_Co dijo el día 26 de Septiembre de 2011 a las 15:24:28:

Capto de sobra las connotaciones de "matrimonio homosexual" igual que capto de sobra todos sus requiebros para seguir negándose a la unión entre homosexuales. La gente que se casa con fines fraudulentos también desprestigia la "institución" del matrimonio y no por ello se prohíbe, asi que no se escude usted con malabarismos del tipo "homosexualidad" y "homosexualismo". Dígame si en EEUU el problema es también puramente semántico, don Sabio.

« 1 2 3 4 5 »