La admisión a trámite del recurso contra la reforma laboral por parte del Tribunal Constitucional llenó de júbilo este lunes a los grupos que habían interpuesto sendos recursos: PSOE e IU. Ambas formaciones coincidieron en su "satisfacción" por la "premura" con que se habían aceptado sus reclamaciones pero incidieron también en que es necesaria "la máxima urgencia" en resolver los recursos habida cuenta de que "están en juego los derechos de los trabajadores". También hicieron un llamamiento al diálogo, negociación y rectificación del Gobierno en este asunto.
Desde el PSOE, la portavoz de Empleo, Concha Gutiérrez, aseguró que la reforma del PP sólo pretende "desvirtuar y romper este modelo de relaciones laborales atacando la negociación colectiva, el derecho al trabajo, la garantía que brinda nuestra constitución frente a la discriminación y la tutela judicial. Y, por lo tanto, atentatoria contra diez artículos de nuestro texto constitucional".
Desde IU, su portavoz José Luis Centella, fue aún más explítio al explicar que "el PP no sólo está dañando la economía sino que está poniendo en cuestión la propia Constitución. La reforma laboral plantea claramente un atentado contra la Constitución". Por ello, su grupo presentará en los próximos días una iniciativa con el objetivo de que "se suspenda su aplicación. La reforma laboral está puesta en cuestión por el más alto tribunal y sería una temeridad que se siga aplicando cuando hay indicios de que hay artículo que no sean constitucionales".
Fuentes del grupo parlamentario popular restaron peso sin embargo a la admisión a trámite del PP por tratarse "simplemente de eso, un trámite, que se acepta en el 90% de los casos".