Bajo el título La crisis del régimen de 1978, Podemos y la posibilidad del cambio político en España, el partido que lidera Pablo Iglesias ha preparado un documento con la estrategia que quieren seguir en el año y medio "decisivo" que va desde el 25-M a las generales. En el borrador se alerta de la importancia de que en este "ciclo acelerado" el partido construya "una máquina política, discursiva y electoral". El objetivo, "aprovechar" el momento y construir "una voluntad popular nueva para el cambio político en favor de las mayorías sociales". Es decir: sacar rédito a la convulsión política para llegar al poder.
En el análisis del panorama político tras el 25-M, Podemos insiste una y otra vez en lo único del momento y en la importancia de sacarle partido para lograr sus objetivos. Y pone el acento, sobre todo, en la situación del PSOE. Según Podemos, el "elemento fundamental" de la erosión de los partidos "del régimen" es el "desgaste y la crisis del PSOE".
"Es quien cierra el espacio político por la izquierda y es su crisis la que abre las oportunidades políticas para una nueva mayoría", continúa. "Si se recompusiera siquiera parcialmente de su desprestigio y sus problemas internos, y postulase un nuevo líder con pocos vínculos simbólicos con el pasado, podría recuperar parte del espacio perdido y estrechar así las opciones para una fuerza de ruptura democrática", avisa.
Otro riesgo que cita Podemos para su expansión e hipotética llegada al poder es que el Gobierno pueda exhibir "tímidas evidencias" de recuperación. "Por lenta y remota que sea", avisa, "la narrativa de que se han hecho los deberes más duros y ahora se avecina el tiempo de la cosecha del esfuerzo es muy peligrosa".
El momento actual, insiste el documento, constituye "una oportunidad difícilmente mejorable en un contexto no revolucionario" por la "debilidad" del Gobierno, ausencia de buenas noticias económicas y, reitera, "la crisis del principal partido de la alternancia". Pero hay otros riesgos: mantener a Podemos como referente será "incompatible con el menor caso de corrupción" y "difícil de mantener" cuando se "enreden en la gestión" y "sus necesarias transacciones y compromisos".
Por todo ello, Podemos avisa de que "el momento es ahora", antes de que "los grandes actores" recompongan "su legitimidad perdida". "Es ahora, en el momento de la descomposición, cuando Podemos puede ser una palanca que subvierta las posiciones dadas". Pone la vista en el ciclo electoral que se avecina, con menciones a las "municipales, autonómicas y generales". Y se congratula del eco mediático que se está encontrando: "No es exagerado decir que estamos hoy en el centro del debate político". A su juicio, los "ataques" políticos y mediáticos pueden conllevar una "reacción boomerang" entre sus seguidores y atraer más apoyos.