Durante las últimas sesiones de control al Gobierno, Pérez Rubalcaba, cuando acude, evita responder a las preguntas de Gil Lázaro sobre el caso del chivatazo a ETA. Al principio respondiía irritado y ahora lo hace con burlas.
Este miércoles, el ministro del Interior recriminaba al diputado popular que cada semana le pregunte por el caso. “Llevo 16 semanas intentando que usted hable del caso Faisán y no dice nada”, dijo Gil Lázaro.
A renglón seguido, Rubalcaba con un tono irónico y mirando a su bancada, buscando su aprobación, se burló diciendo que “si dice que no he contestado no tiene sentido su pregunta”, que se refería a las informaciones equivocas dadas por el ministro. Al momento, sus compañeros socialistas interpretaron su papel, y rieron la gracia de su jefe.
Sin embargo, el popular no se amilanó: “puede seguir usted con la guasita” pero añadió que “ha hecho esas declaraciones equivocas para no decir la verdad y no responder mis preguntas”. Además, acusó a Rubalcaba de contruirse “una coartada mezclando la operación Urogayo (extorsión de ETA) con el chivatazo para ocultar su responsabilidad”. “Extorsión y chivatazo son temas distintos búsquese otra coartada y déjese de cuentos chinos”, sentenció Ignacio Gil Lázaro.
Por su parte, el ministro del Interior dijo que el argumento del popular es de “aurora boreal”.
