Iba hoy conduciendo por la carretera de La Coruña, camino de la Cadena Cope, pensando en el primición mundial del fichaje de Zidane por el Real Madrid que daba el martes el "Tirachinas" (nuestra "radio station" ha salido citada por la CNN estadounidense, el diario argentino Clarín o el prestigioso L'Equipe francés como orígen de la noticia) cuando de repente, enfrente mío, vislumbré un monovolumen. En la parte trasera del mismo podía leerse lo siguiente: "Selección melillense de pentatlón moderno". Mientras, a la altura de Las Rozas, los componentes de dicho equipo marchaban ufanos sólo Dios sabe a qué campeonato, en Turín se confirmaba el traspaso futbolístico más caro de toda la historia. Se irán concretando poco a poco las cantidades aunque para abrir boca quédense con estas dos: 12.800 millones de pesetas para la Juventus de Turín y otros 1.500 al año para el jugador por cada una de las cinco temporadas que estará en el estadio Santiago Bernabéu. Total, una operación cuyo montante económico podría llegar a los 25.000 millones (o sea, una torre).
Adelanté al monovolumen con matrícula de Melilla y, al mirar por el espejo retrovisor, pude verles charlando, riendo; incluso me los imaginé cantando a coro "Asturias, patria querida". Me dieron ganas de parar el tráfico y hacerles la ola a esos anónimos héroes del pentatlón moderno. Tras haber sondeado en profundidad el mercado inmobiliario madrileño, F.P. parece haberle encontrado a Zidane un palacete valorado en 500 millones. Desconozco cuál será el presupuesto de nuestra selección nacional de pentatlón moderno pero me sorprendería mucho que llegara a la décima parte del valor de la nueva casa del jugador francés.
¿Consecuencias del fichaje de Zinedine? Muy claras: fortalecimiento definitivo de F.P. como presidente madridista y hundimiento del Barcelona, que no levanta cabeza desde que le quitaron a Luis Figo. Decía Cesare Maldini que a él no le importaría jugar con cinco futbolistas menos si podía contar con Zidane en su equipo. No creo que Del Bosque "trague" y es probable, sólo probable, que a pesar de entrenar a los mejores futbolistas del mundo, él quiera seguir saliendo al campo con once. Roberto Carlos, Raúl, Figo, Zidane... ¿Tendrá que bajarse del autobús este Real?
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