Menú

La empresa de pollos SADA podría ser sancionada con 616.000 euros

A pesar de que la responsable de Castilla La-Mancha de Salud Pública, Berta Hernández, explicó que la empresa SADA, comercializadora de los pollos precocinados causantes de la intoxicación por salmonella de más de 2.700 personas, pasaba las "inspecciones habituales y periódicas" y que "no se encontraron anomalías", la Consejería de Sanidad manchega ha determinado este miércoles que es responsable de una falta muy grave y de otra grave. Podría ser sancionada con un máximo de 616.000 euros.

A pesar de que la responsable de Castilla La-Mancha de Salud Pública, Berta Hernández, explicó que la empresa SADA, comercializadora de los pollos precocinados causantes de la intoxicación por salmonella de más de 2.700 personas, pasaba las "inspecciones habituales y periódicas" y que "no se encontraron anomalías", la Consejería de Sanidad manchega ha determinado este miércoles que es responsable de una falta muy grave y de otra grave. Podría ser sancionada con un máximo de 616.000 euros.
L D (EFE) Esta determinación la ha expuesto en las Cortes de Castilla-La Mancha el consejero de Sanidad, Roberto Sabrido, quien ha explicado que la falta muy grave responde a la contaminación por los fallos en el autocontrol del sistema de producción de la fábrica, ubicada en Lominchar (Toledo), y que la grave es consecuencia de la ausencia de información a los organismos de control de los cambios realizados en la línea de producción.
 
Sabrido, a quien el PP pidió que dimita "por vergüenza torera", aseguró que SADA ha aceptado su responsabilidad y los cargos que se le imputan y manifestó que, tanto los sistemas de inspección de la Junta de Castilla-La Mancha, como la red de alerta sanitaria funcionaron correctamente. A su juicio, el Gobierno regional actuó "con la máxima responsabilidad y diligencia", y es la empresa, según la ley, la única responsable de poner en el mercado productos no aptos para el consumo humano.
 
Detalló que SADA no notificó a las autoridades que la salsa de los pollos "Sada" y "Pimpollo" contenía, además de aceite de girasol, el jugo que desprende el pollo durante el asado, y agregó que tampoco hubo información sobre el cambio del sistema de dosificación de la salsa. Por ello, los servicios de inspección, en la visita que realizaron el 26 de julio cuando ya había productos contaminados, no pudieron analizar el sistema de dosificación, en el que se halló posteriormente una zona ciega con el foco de salmonella y al que le fallaba el sistema de pasteurización.
 
El consejero agregó que tampoco se detectó la bacteria en la salsa, porque en el mismo lote de productos había pollos que estaban contaminados y otros que no, pues en las primeras horas de la mañana la salsa no alcanzaba los sesenta grados de temperatura a los que se destruye la bacteria. Sin embargo, cuando el sistema de producción llevaba un tiempo en funcionamiento el jugo alcanzaba los 180 grados por lo que, aunque no funcionara la pasteurización, la bacteria se eliminaba.
 
"Supervisamos todo aquello de lo que teníamos conocimiento", recalcó el consejero, quien recordó que la empresa era objeto al menos de dos inspecciones semanales. No obstante, reconoció haber encargado a la Dirección General de Salud Pública un informe sobre la posibilidad de mejorar los sistemas de control e inspección en empresas muy complejas, con mucho personal y una gran capacidad de producción.
 
El diputado del PP, José Manuel Rodríguez Carretero, denunció el retraso con el que han llegado las explicaciones del consejero, la ausencia de transparencia y la incapacidad de los servicios de inspección castellano-manchegos para detectar el problema. A su juicio, los ciudadanos de la región están "desamparados" y no tienen confianza en los sistemas que deben protegerles, por lo que urgió a Sabrido a que presente su dimisión "por vergüenza torera".El consejero aseguró que no piensa renunciar.

Temas

En Sociedad

    0
    comentarios