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Juan Manuel Rodríguez

Volverá el "lobby amable" en el balcón del COI sus nidos a colgar

Fuimos con el lirio de Lissavetzky en la mano y así nos fue. ¿Cree realmente Gallardón que tenemos la más mínima posibilidad de ganar o lo que busca es otro gancho publicitario?

El famoso periodista José María Íñigo era un crítico musical verdaderamente despiadado, un cronista intratable, un auténtico "devorador de hombres". Por ejemplo, cuando Karina sacó a la venta su segundo disco, Íñigo tituló así el artículo: "Sale a la venta el segundo disco de Karina... ¿Por qué?"... De la reunión que mantuvieron Alberto Ruiz Gallardón, alcalde madrileño, y Alejandro Blanco, presidente del Comité Olímpico Español, se "desprende" que la capital de España volverá a ser candidata a organizar los Juegos Olímpicos. Y yo me pregunto, ¿para qué?...
 
¿Volverán los chicos del "lobby amable" en el balcón del COI sus nidos a colgar, y otra vez con el ala a los cristales del despacho del francófono Jacques Rogge jugando llamarán?... ¿Queremos jugar o queremos ganar? ¿Qué es lo que queremos exactamente?... Si queremos jugar y que "nos jueguen", sinceramente no creo que nos merezca demasiado la pena perder tanto tiempo y tanto dinero de los contribuyentes. Si lo que pretendemos es ganar la elección en 2009, cuando se elija la organizadora de los Juegos de 2016, hablemos de negocios. Así de simple. Así de sencillo. Hablemos de negocios con el Comité Olímpico Internacional. Es lo que hizo Sebastian Coe en defensa de los intereses de Londres. Y el resultado fue que un proyecto virtual como el británico se llevó el gato al agua.
 
Esperemos que "Madrid 2016" no surja esta vez con vocación masoquista. Sería deseable que, cuando Carod Rovira pida otra vez (que lo hará) el boicot a la candidatura española, alguien le responda. En ese sentido la experiencia de la extinta oficina de "Madrid 2012" no pudo resultar más frustrante. Dejamos que nos ofendieran. Permitimos que nos insultaran. Consentimos que fueran minando, lenta pero inexorablemente, nuestra moral, y nadie dijo nada. Fuimos con el lirio de Lissavetzky en la mano y así nos fue. ¿Cree realmente Gallardón que tenemos la más mínima posibilidad de ganar o lo que busca es otro gancho publicitario? ¿Piensa Blanco que Madrid puede ganar o lo que desea es empezar con fuerza en su nuevo puesto?... Lo de convertir a Madrid en una ciudad olímpica permanente me parece muy bien, siempre y cuando Rogge no vuelva a golpearnos con los cinco anillos en la cabeza.

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