He vuelto a Ibiza, el epicentro de los personajes de la crónica social desde hace varios años. En la isla balear es donde Paco Roncero ha hecho realidad uno de sus sueños, que consiste en crear un show gastronómico con la ayuda de Land Rover, una de las marcas que han apoyado al conocido cocinero premiado con dos estrellas Michelin.
Cada noche, Roncero ofrece esta cena-show sólo a doce comensales, que pagan 1.600 euros por degustar esos platos elaborados de una manera tan ingeniosa.
Anoche tuve la oportunidad de disfrutar ese menú, que consiste en veinte platos que venían a ser veinte escenas del mejor show culinario del momento.
En la mesa también estaba Enrique Solís, hijo de Carmen Tello, que esta pasando unos días de vacaciones en la isla balear con unos amigos. "Salimos en barco desde Cádiz y estaremos una semana", me comentó. Enrique está muy contento por el buen funcionamiento de su hotel en el centro de Madrid, que inauguró hace unos meses.
Desde hace unas semanas a Enrique se le relaciona sentimentalmente con Támara Falcó, pero el joven empresario insiste que en la hija de Isabel Preysler es simplemente una amiga y no son pareja.
Ana Rodríguez, ex mujer de José Bono, fue otra de las comensales que acudió a "SubliMotion", título de la cena de Paco Roncero en el Hotel Hard Rock Ibiza, donde han pasado unos días de vacaciones Paula Echevarría y David Bustamante. Ana me comentó en el transcurso del concierto del Dj Tinie Tempah, antes de la cena, que por el momento no piensa en boda con el empresario mexicano, Ernesto Manrique, con el que mantiene una relación desde hace varios años.
