Felipe VI cenó por sorpresa en una bodega de la localidad sevillana de Arahal, en una visita informal un día antes de recibir la primera Medalla de Honor de Andalucía en el Palacio de san Telmo, sede de la presidencia de la Junta.
La bodega ha señalado que conocieron a última hora de la tarde que el Rey cenaría en su establecimiento junto a varias personas de su cuerpo de seguridad, y para ello prepararon una mesa al fondo del local, en el que estuvo hasta las 23:30 aproximadamente.
El Ayuntamiento de la localidad ha confirmado que la visita fue de carácter privado y solo se avisó a los propietarios del local, con medidas de seguridad leves, como retirar las mesas exteriores del local.
Además, no fue necesario establecer ningún dispositivo de tráfico, al estar la bodega en una calle de fácil acceso, con poco tráfico a esa hora y cerca de la salida de la localidad hacia la A-92.
A la salida de la cena, varios vecinos le esperaban tras conocer la noticia, y para despedirle con aplausos, después de hacerle varias fotos y vídeos; incluso el rey se fotografió con una niña a la puerta del bar.
Un miembro del cuerpo de seguridad del rey es arahalense, lo que parece haber influido en la elección del lugar de la visita, que ha tenido también un componente cultural, ya que Manolo Blanca, fundador del establecimiento que ahora regentan sus hijos, mostró al monarca quiénes eran los protagonistas de las fotos que están colgadas en sus paredes, la mayoría artistas del flamenco.