De luto, con ganas de sol y mascarilla negra que apenas dejaba ver su rostro, así ha reaparecido este sábado Isabel Pantoja en el aeropuerto de Sevilla antes de poner tumbo a Buenos Aires, Argentina, para dar comienzo a su gira latinoamericana. Acompañada de su inseparable hermano, la tonadillera ha esperado en el coche hasta que Agustín ha solucionado en papeleo en el aeropuerto, cuando ha terminado ambos han entrado en el mismo mostrándose amables con la prensa: "Buenos días", ha dicho la artista a los medios allí presentes.
En unas horas Isabel Pantoja llegará a la capital argentina donde el próximo martes 24 de mayo actuará en el Luna Park, uno de los auditorios más grandes del país que cuenta con casi 10.000 localidades. Después viajará a Chile, donde dará dos concierto en el Gran Arena at Sun Monticello Casino, en Mostazal, los días 27 y 28, y concluirá con un concierto en el Plaza Arena de Lima, Perú, ante más de 10.000 espectadores.
Un esperado regreso a los escenarios después de los complicados momentos que ha atravesado en los últimos meses: la muerte de su madre, doña Ana, en verano del año pasado y, más recientemente, el juicio por insolvencia punible en el que le pedían tres años de prisión y del que ha sigo absuelta.
Su inseparable hermano Agustín será quién la acompañe durante su periplo por América y quién la asista durante esta nueva gira. En esta ocasión no viajará junto a su sobrina Anabel Pantoja, quien siempre que puede le acompaña ya que está concursante en Supervivientes. Tampoco contará con el apoyo de sus dos hijos, Chabelita y Kiko, que se quedan en España para continuar con sus compromisos profesionales y cuidar de sus respectivos hijos.