El empresario y vicepresidente primero del Real Madrid, Fernando Fernández Tapias ha fallecido este miércoles a los 84 años de edad en Madrid. La cadena COPE ha dado la noticia confirmando con fuentes de la familia la pérdida del fundador de las empresas navales Amura S.A. y Roda S.A.; de Fernández-Tapias S.A. (naval, 1991), Conservas Peña S.A. y Conservas Portonovo S.A., la sección marítima de Bureau Veritas SAF (dedicada al control de calidad) y Viajes Sandra's S.A.
La vida sentimental del empresario siempre fue muy agitada, además de muy presente en los medios de comunicación. De su primer matrimonio con Victoria Riva Luna (Chiqui), tuvo cuatro hijos. Las buenas relaciones con su suegro, propietario de la naviera Suardíaz, propiciaron su lanzamiento profesional. Con su segunda mujer, Juana Courel Mendoza, tuvo otros dos hijos.
En 2002 se casó en terceras nupcias con Nuria González Sánchez, treinta años menos que él, hija de una diputada del PP, con la que ha tenido otros dos hijos.
Unos últimos años muy complicados
En el año 2021, Fernando Fernández Tapias decidió abandonar las funciones ejecutivas de su imperio y ceder las riendas de la mayor parte de sus sociedades a su hijo Juan Carlos, de 38 años —fruto de su matrimonio con Juana Courel— y más conocido como Tito. Lo que no podía imaginar es que sus hijos mayores, Fernando, Borja e Íñigo, fruto de su primer matrimonio, con Chiqui de la Riva, a los que relevó de sus cargos ejecutivos en sus sociedades en los últimos años y con los que en esos momento ya no tenía relación, iban a tomar medidas en el asunto, intentando evitar que Tito se convirtiese en el nuevo presidente del Grupo Tapias.
Para ello, denunciaron a su padre y pidieron su incapacitación, acusando al naviero de no estar en plenas condiciones para tomar ciertas decisiones, como la de su relevo al frente de sus empresas. Una traición que Fefé, como le llamaban cariñosamente, no se esperaba pero que afrontó, como todo en su vida, con entereza y valentía. Una demanda de la que salió victorioso, logrando así que sus hijos no se salieran con la suya.
Tampoco agradó a sus vástagos mayores su matrimonio en el año 2002 con Nuria González, que ha estado a su lado hasta sus últimos momentos. Un matrimonio feliz que, no obstante, provocó disgustos a los hijos de sus dos anteriores matrimonios, los responsables de la citada demanda. Y es que estos cuatro hijos (uno de ellos murió en un accidente de buceo) tenían una "pésima" relación con su madrastra acusándola incluso de tener "secuestrado" a su padre.
Nuria González nunca ha entrado al trapo de las provocaciones y se ha limitado a ser discreta y estar junto a su marido, quedando ahora viuda a los 51 años.