En medio de su triunfal gira mundial que el año que viene le llevará a España, Luis Miguel encuentra tiempo para estrechar lazos con su familia. Tal y como publica la revista Caras, de México, el Sol de México ha cenado con Paloma Cuevas, su hija Michelle Salas y su hermano Alejandro en un prestigioso restaurante de Las Vegas.
La presencia de la hija recién casada de Luis Miguel, a la que el cantante acompañó al altar, sirve para desmentir -de nuevo- rumores sobre su mala relación. Y la inclusión de la española Paloma Cuevas, para demostrar una vez más que la ex de Enrique Ponce está más que integrada en la familia del cantante. Alejandro, por su parte, es el hermano con quien Luis Miguel mantiene más contacto.
El lugar elegido era Delilah, un restaurante que destaca por sus platos de marisco y caviar y en el que se incluye música en vivo y espectáculos junto a la cena. Todos ellos charlan alegremente, ríen y se gastan bromas, demostrando que todo está bien en el círculo íntimo del cantante.
A un lado quedan los intentos de su ex, Araceli Arámbula, de generar polémica en medios mexicanos con asuntos como la pensión -ya pagada- de sus hijos y otros asuntos. La unión de la familia de Luis Miguel es un hecho, a tenor de las instantáneas publicadas por la revista Caras.
Mientras tanto, Luis Miguel puede presumir de llenar todas las localidades en su gran gira mundial. El verano que viene estará en Madrid por partida doble en el Santiago Bernabéu, donde no hay una plaza libre. También completa su presencia en España con una serie de conciertos que demuestran el interés del astro por la piel de toro y proporcionar a sus numerosos fans españoles un gran espectáculo.