Yolanda Díaz y su marido, Andrés Meizoso, se dicen adiós en buenos términos. Andrés, de profesión delineante, siempre ha ocupado un voluntario segundo plano en las apariciones de su esposa. Aunque se casaron el 15 de noviembre de 2004, nunca nadie del entorno de la vicepresidenta se ha referido a Andrés como su marido sino como su "compañero".
Así lo expone LOC, que señala que la separación física -ella está en Madrid, él en Galicia- ha sido clave en la separación entre ambos compañero y compañera, que no marido y mujer. "Siguen siendo buenos amigos, aunque ya no convivan", aseguran en la publicación.
Díaz reside en la gran casa que el ministerio ha dispuesto para ella en la capital, nada menos que en Nuevos Ministerios. La misma de la que se quejó en televisión recientemente, en el programa Late Xou de Marc Giró. Vive con Carmela, la hija de ambos, de 11 años.
Andrés, sin embargo, se encargaba de ejercer de padre y de madre hasta hace poco, lo que contradiría el tan cacareado término de monoparentalidad esgrimido por Yolanda Díaz. La fuente de LOC es el propio padre de la vicepresidenta, el sindicalista Suso Díaz.
"Soy una mujer libre, me lo hago todo yo. Cocino, plancho la ropa...", dijo Yolanda en la tristemente célebre entrevista que, además, ya daba a entender en cierto modo esta separación. Ya entonces las imágenes con Andrés en redes sociales brillaban por su ausencia, a diferencia de antaño.
"Ella trabaja muchísimas horas, por lo que se han ido distanciando. Pero se llevan genial, son amigos y siguen comportándose como una familia. No hay ningún mal rollo, ni terceras personas", esgrimen las fuentes de LOC sobre las posibles causas de este adiós.