
Tras dar la bienvenida el pasado 3 de julio a su primer hijo, que ha recibido el nombre de Lucas, José Luis Martínez-Almeida y Teresa Urquijo celebraron este viernes su bautizo.
El pequeño recibió las aguas bautismales en un lugar muy significativo para el matrimonio, la finca 'El Canto de la Cruz' -propiedad de los abuelos maternos de la joven- donde celebraron su boda el pasado 6 de abril de 2024.
Lejos de su multitudinario enlace, que contó con cientos de invitados, entre los que se encontraban los Reyes Eméritos, las Infantas Elena y Cristina, Froilán, o Victoria Federica, además de numerosos compañeros del Partido Popular, en esta ocasión la pareja ha preferido que el bautizo de Lucas fuese una ceremonia íntima y familiar, a la que asistieron tan solo su entorno más cercano.
A media tarde comenzó el trasiego en los alrededores de esta finca ubicada en Colmenar Viejo, a los pies del imponente Cerro de San Pedro, en plena Sierra de Guadarrama. Entrando en la finca se dejaron ver la madre de Teresa, Beatriz Moreno y de Borbón; su abuela Teresa; su hermano Juan y el propio Almeida. Se presupone que el resto de la familia se encontraba ya en el interior de la finca.
Según detalla la revista Hola, la ceremonia religiosa se celebró en la capilla privada de la finca y fue oficiada por dos sacerdotes: el párroco de Colmenar de Oreja y otro amigo cura al que la familia llama 'El Pater'. Después del servicio religioso, ya con el sol poniéndose, disfrutaron de un cóctel en el jardín que se extiende por 25 hectáreas y cuenta con unas vistas privilegiadas de Madrid.
Los padrinos del pequeño fueron Juan Urquijo, hermano de Teresa y una de las sobrinas de Martínez-Almeida, Leticia.
El gran misterio del bautizo del pequeño Lucas, era si Irene Urdangarin, novia del padrino, haría acto de presencia en la finca familiar. En alguna ocasión, ha acompañado a su novio Juan Urquijo a alguna reunión familiar pero en esta ocasión había dudas de su aparición. Tal y como ha sabido en exclusiva este medio, la hija de la infanta Cristina no acudió al evento, a pesar de que algunos medios aseguraban que había accedido al interior discretamente para evitar ser captada por los fotógrafos.
