Las 10 montañas más bonitas de España

España es conocida por su cultura, la variedad de sus paisajes como playas con grandes dunas, paisajes desérticos, montañas, campos de lava, bosques o campos de olivos y, por supuesto, su deliciosa gastronomía.

Las siluetas de las montañas son únicas y quedan grabadas para siempre en la memoria, sino en los móviles y cámaras de fotos que siempre llevamos encima. Por eso, si eres un amante de la naturaleza y te gustaría planear una excursión a la montaña pero no acabas de decidirte, te traemos 10 ideas de montañas que te van a dejar sin respiración, además, sin salir de España.

Como dato curioso de las montañas españolas más de dos kilómetros separan el pico más alto de España del pico más bajo de entre los más elevados de nuestras comunidades autónomas.

Los montes y montañas son una de las principales fuentes de flora y fauna del planeta, además actúan como depósito natural de agua y protegen a las poblaciones de fuertes rachas de viento y otros fenómenos climatológicos que pueden resultar agresivos.

Teide, Tenerife (Canarias)

Para llegar hasta lo alto de este volcán en el archipiélago canario se necesita del teleférico o, para los más valientes, hay ruta a pie entre coladas de lava y lechos de picón desde Montaña Blanca. Si se hace a pie debe irse con calzado adecuado y agua, es una montaña de 3.718 metros de altura. Lo bonito de esta montaña, además del paisaje que lo rodea, es que desde lo más alto puedes disfrutar de las vistas de todo el archipiélago.

Montañas del Fuego, Timanfaya (Lanzarote)

No están entra las más altas, pero sí entre las más asombrosas de España. Las montañas del Fuego, una cadena de volcanes en el parque nacional de Timanfaya, en Lanzarote, se pueden visitar en el autobús que parte del Islote de Hilario y llega hasta el mirador de la montaña Rajada, o bien por las rutas guiada y gratuitas de Tremesana o del Litoral (previa reserva).

En ellas encontrarás la belleza de la desolación, regalando una sinfonía de colores ocres que no te dejaran indiferente. La cota más alta llega a los 510 metros, pero ofrece un paisaje volcánico único. Estos volcanes se encuentran en el Parque Nacional de Timanfaya, en Lanzarote.

Mulhacén, Sierra Nevada (Granada)

Es el pico más alto de la Península y, por ello, es uno de los mayores atractivos de Sierra Nevada. El Mulhacén alcanza los 3.482 metros de altitud y su cima ofrece una amplia vista del Estrecho, Salobreña, Motril, Granada y los barrancos de las Alpujarras. ¿De dónde viene su nombre? De Muley Hacén, que proviene, a su vez de la castellanización de Mulay Hasán. ¿Quién era el susodicho? Pues un rey nazarí de Granada del siglo XV, del que se cuenta que fue enterrado allí mismo.

Veleta, Sierra Nevada (Granada)

Y no nos movemos de Granada porque en la misma sierra encontramos esta otra cumbre a 3.398 metros. En ella se encuentra la pista de esquí más alta de España. Con casi tres kilómetros de longitud, la pista del Veleta se convierte durante la temporada de verano en un circuito de descenso para bicicletas todoterreno. El nombre Veleta viene de la palabra árabe balata, que quiere decir «cortado, tajo o balate», haciendo referencia a los grandes cortados de la cara norte, este y sur.

Aneto, Pirineos (Huesca)

Es la cumbre más alta de Pirineos, su pirámide se alza sobre cuatro glaciares y se ve desde cualquier punto de la cordillera y desde muchos rincones de la comarca oscense de Ribagorza. Aunque la ascensión por la vía normal exige una buena preparación física, en verano no requiere mucho nivel técnico. Sin embargo, su último paso, el Paso de Mahoma, no es apto si sufres de vértigo, ya que es una cresta entre abismos que llevan directamente al montañero a la cima.

Esta montaña envuelve misterios y curiosidades. Una de éstas es la historia del peregrino que llegó a la comarca y en uno de sus paseos se topó con Netu, un demonio que tenía aterrorizadas a las personas de las praderas. Se dice que el peregrino lanzó una maldición al gigante que quedó petrificado al instante, y eso es hoy el pico del Aneto.

Maladeta, Pirineos (Huesca)

El parque natural Posets-Maladeta, 33.267 hectáreas de terreno protegido en pleno Pirineo aragonés, dentro de los términos municipales de Benasque, Gistain, Montanuy, Sahún y San Juan de Plan, acoge uno de los ecosistemas de alta montaña más valiosos de la península Ibérica, coronado por el Aneto (3.404 metros), la cima más alta del Pirineo; por el Posets (3.375 metros), la segunda cumbre más alta de la cordillera, y por La Maladeta (3.308 metros).

El nombre de La Maladeta podría venir del término malladeta, que en aragonés significaría "majadita". Estaría compuesta por la palabra mallata (majada), con el sufijo en aragonés -eta, que es un diminutivo. En aragonés, una malladeta también puede ser una palabra compuesta del término mallo (aguja), con los sufijos -ada, que indica conjunto de cosas, y el diminutivo -eta, lo que significaría "pequeña zona de mallos" lo cual coincide con la geografía del lugar.

Monte Perdido, Pirineos (Huesca)

Formado por una serie de valles y relieves de origen glaciar, el parque nacional de Ordesa cuenta con varias cimas que superan los 3.000 metros, con el Monte Perdido, tan hermoso por su nombre como por sus 3.355 metros de altura. A sus bosques de hayas y coníferas se suma una variada flora y fauna.

Desde la cima puedes apreciar el Cilindro de Marboré y la cresta de los picos de la Cascada de Gavarnie. Esta excursión es ideal para subirla durante un fin de semana haciendo noche en el cómodo refugio de Góriz o, si eres un espíritu libre, puedes acampar bajo las estrellas.

Es importante señalar que la primera persona que llegó al "techo" de Ordesa y Monteperdido, el Pico de Monte Perdido, fue Louis Ramoind des Carbonniéres, en 1802, y que lo consiguió en su tercer asalto. Por si todo esto fuera poco, otra de las curiosidades del Parque de Ordesa y Monte Perdido es que incluye la Cascada de Gavarnie, considerada la cascada más alta de Europa con sus 400 metros de caída.

Els Encantats, Pirineos (Lérida)

Gran Encantat (2.746 m) y su hermano pequeño, Petit Encantat (2.733 m) conforman los «picos gemelos» de Els Encantats. Estos emblemáticos picos se encuentran en la parte oriental del parque nacional de Aigüestortes / Estany de Sant Maurici, en los Pirineos. No son los picos más altos del parque nacional, pero se elevan sobre el embalse de Estany de Sant Maurici (aproximadamente 1.900 m) y la vista de ellos a través del embalse es realmente sorprendente.

Moldeadas por los hielos de los glaciares, las rocas graníticas del parque nacional de Aigüestortes forman un extenso paisaje de cascadas, barrancos y más de 300 lagos, la mayor concentración de los Pirineos, enmarcados por las agujas gemelas de Els Encantats.

Las agujas gemelas de 2.748 metros ofrecen vistas del Parque Nacional de Aigüestortes situado en Lleida. Este parque se caracteriza por su gran concentración de lagos, ya que aquí se encuentra la mayor concentración de lagos pirenaicos de los Pirineos, y como consecuencia, hay cascadas espectaculares que descienden sobre los barrancos.

Peñalara, Sierra de Guadarrama (Segovia y Madrid)

Los extensos bosques de Valsaín cubren la vertiente segoviana de la Sierra de Guadarrama, al abrigo de las lomas de la Mujer Muerta, Siete Picos y la cumbre de Peñalara, la cota más alta de estas montañas, declaradas en 2013 parque nacional.

En el Parque Natural de las Lagunas de Peñalara hay varias pequeñas lagunas entre las cuales destacan dos, la Laguna grande de Peñalara y la laguna de los Pájaros. La Laguna de Peñalara o Laguna Grande de Peñalara es de origen glaciar y se localiza en el fondo del circo de Peñalara, a 2.017 metros de altitud. Pertenece al término municipal de Rascafría y está dentro del Parque Natural de Peñalara. Un lugar bello y enigmático rodeado de praderas y áreas rocosas con piornos y enebros rastreros.

Almanzor, Gredos (Ávila)

Las faldas del pico Almanzor, la cumbre más alta del Sistema Central con 2.592 metros de altitud, y las orillas de sus lagunas glaciares, en la sierra de Gredos, son el hábitat de las cabras montesas. A sus pies se abre el Circo de Gredos, un paisaje sorprendente de agujas y cuchillares de origen glaciar, a cuyos pies se desliza el agua hasta la hermosa laguna en el fondo del Circo.

Hay dos teorías fundamentales de por qué se llama así. La primera se deriva de la dificultad de su propia subida. Los que han ido, dicen que algunos tramos de la subida a la cubre del son tan terroríficos como el mismísimo guerrero Al Mansur. Y de ahí su nombre.

La segunda teoría y quizá más interesante, es que se trata de una leyenda. Se cuenta que cuando el guerrero musulmán volvía de una de sus batallas, descansó en el Circo de Gredos, que estaba justo delante del mismo pico. Y en ese lugar había un mito que contaba que se oían sonidos procedentes de los ríos que nacían en las montañas. Como el propio Al-Mansur no los escuchaba, fueron los pastores que, temerosos de la reacción del guerrero, pronunciaron su nombre y se magnificó por el eco de las montañas. Maravillado por el suceso, el guerrero quiso que aquella montaña llevara su propio nombre.