
Madrid no tiene mar, pero sí mucha agua. Cuando se piensa en la capital lo primero que cualquier viajero recuerda suele ser el bullicio y las tiendas de la Gran Vía, sus museos, el Palacio Real o sus barrios históricos. Sin embargo, existe un mundo fuera de la ciudad que no te esperas, una Comunidad rica en parajes sorprendentes, ríos, embalses y piscinas naturales donde el agua es el principal protagonista. Una parte de la Comunidad es ideal para los aficionados al turismo activo y acuático, con muchas propuestas fuera del calor de la urbe.
Es por ello que la Comunidad de Madrid posee rutas y actividades muy vinculadas al turismo del agua repartidas en sus cuatro grandes territorios: la Sierra Norte, la Sierra de Guadarrama, la Sierra Oeste, Las Vegas y Alcarria de Madrid. Una experiencia para redescubrir la región desde una perspectiva diferente, mezclando naturaleza, pueblos con encanto y con el agua como hilo conductor.
Sierra Norte: ocio en aguas tranquilas
La Sierra Norte de Madrid es una joya escondida que invita al viajero a tener un contacto directo con la naturaleza gracias a lo mucho que ofrecen sus espacios protegidos en buena parte de su territorio y también una serie de propuestas de ocio dentro de sus maravillosa reserva de la Biosfera como la Sierra del Rincón. En la Sierra Norte es muy fácil practicar actividades acuáticas como piragüismo, paddle surf y navegación en kayak. Muchas de ellas pueden contratarse con empresas acreditadas pertenecientes a la Asociación de Empresas de Turismo Activo y Ecoturismo de la Comunidad de Madrid (AETAM), algo que facilitará al visitante la planificación de su jornada lúdica.
Esta comarca también alberga espacios únicos como el Hayedo de Montejo, uno de los bosques más singulares de España y declarado Patrimonio Mundial Natural por la UNESCO. El acceso al Hayedo de Montejo está estrictamente regulado para preservar su biodiversidad, por lo que solo se puede visitar mediante visitas guiadas organizadas y con reserva previa. Durante el recorrido, los visitantes pueden disfrutar de rutas interpretativas entre hayas centenarias, acompañados por guías especializados que explican la riqueza natural de este enclave protegido.
Sierra de Guadarrama: naturaleza y aguas cristalinas
La Sierra de Guadarrama, declarada Parque Nacional, es un paraíso natural repleto de bosques, montañas y ríos. Uno de esos lugares para el descanso estival es el valle de El Paular, en Rascafría, donde se encuentra una de las zonas de baño con más atractivo de toda la sierra: Las Presillas. Esta área recreativa cuenta con piscinas naturales de agua proveniente del río Lozoya, con impresionantes vistas al pico de Peñalara. Las Presillas están habilitadas para el baño en temporada. Un lugar ideal para el picnic familiar durante los meses de verano en la Comunidad de Madrid con el añadido de tener una postal de bonitos paisajes naturales que las rodean.
Las actividades de turismo activo incluyen también barranquismo con descensos con rápeles, toboganes naturales y saltos, siempre guiados por monitores profesionales, y con el equipamiento adecuado, que están adaptadas a diferentes niveles de experiencia. La Sierra de Guadarrama y su entorno inmediato también ofrecen múltiples opciones para deportes acuáticos en embalses y ríos como kayak, paddle surf o piragüismo, para lo que recomendamos a empresas acreditadas como las asociadas a AETAM.
Y más allá del disfrute del agua, la zona ofrece rutas senderistas como la que lleva al Monasterio de El Paular, una joya del patrimonio histórico madrileño sin igual.
Continuando con el turismo rural, en esta parte de la Comunidad de Madrid se ubican varias localidades que merecen ser conocidas. Para ello existe una la ruta que une los 14 pueblos con encanto imprescindibles de la Sierra de Guadarrama.
Sierra Oeste: playas de interior y deportes acuáticos
Al suroeste de la Comunidad, la Sierra Oeste posee una geografía llena de valles y embalses, lugares ideales para el turismo y el ocio acuático. En este territorio se encuentra uno de los destinos menos conocidos para un buen baño veraniego: la Playa del Alberche, situado cerca de la acogedora localidad de Aldea del Fresno. Se trata de una confluencia de los ríos Alberche y Perales que da lugar a una amplia zona de baño, toda ella rodeada de frondosos árboles que proporcionan buena sombra, con mesas de picnic y algunas zonas preparadas para hacer comer.
Entre sus muchos tesoros naturales se encuentra el área recreativa de El Muro, en el embalse de San Juan, cerca de la localidad de San Martín de Valdeiglesias. Este espacio tiene el baño permitido y cuenta con aguas que son controladas con frecuencia para garantizar la seguridad y su calidad. Además, en esta zona recreativa está ubicado el Real Club Náutico de Madrid, fundado en 1961, donde existe la posibilidad de practicar deportes como vela, windsurf y kayak. Un repertorio de propuestas deportivas para todos los gustos y niveles.
Otra zona de baño destacada es la Playa Virgen de la Nueva, la única playa de interior de Madrid con Bandera Azul por la calidad de sus aguas y servicios. Aquí, el visitante puede disfrutar de experiencias náuticas como clases de paddle surf, rutas en barca y otras actividades acuáticas, aptas tanto para principiantes como para deportistas experimentados.
Además, los alrededores ofrecen interesantes opciones culturales e históricas como el castillo de la Coracera, y propuestas gastronómicas basadas en productos de la huerta o carnes a la brasa, regadas con vinos de la Denominación de Origen Vinos de Madrid.
Las Vegas y Alcarria Madrileña: agua, historia y tradición
El cuarto territorio turístico, Las Vegas y Alcarria Madrileña, es una zona rica en patrimonio histórico y paisajes ribereños. Aquí se encuentra Los Villares, una de las zonas de baño autorizadas en la Comunidad de Madrid. Se la conoce como Playa de Estremera o Los Villares y cuenta con merenderos y un chiringuito abierto en la temporada de verano. Este enclave natural junto al río Tajo, casi desconocido, permite disfrutar del agua con tranquilidad, sin riesgo de una gran afluencia de visitantes, perfecto para familias o para quien busca un momento de relax fuera de la ciudad.
Las aguas del río Tajo también son un gran escenario para actividades como el piragüismo o las rutas en canoa, que permiten conocer el entorno desde un punto de vista diferente y más sosegado. También desde este lugar es posible observar aves o conocer la vegetación y la fauna. Para ello, lo ideal es llevar siempre unos prismáticos o una cámara fotográfica para inmortalizar el momento.
Pero Las Vegas y Alcarria Madrileña son también tierra de historia. En municipios como Chinchón o Colmenar de Oreja, el viajero puede pasear entre plazas medievales, bodegas y monumentos. La gastronomía aquí se basa en productos de kilómetro cero: sobre todo destaca su aceite de oliva y sus quesos artesanales.
Las zonas de baño reguladas en la Comunidad
Una de las claves del turismo de agua en Madrid es que el baño solo está permitido en zonas reguladas y autorizadas, por razones de protección ambiental y seguridad. Estas zonas que hemos mencionado: Las Presillas (Rascafría), Los Villares (Estremera), El Muro y Virgen de la Nueva (San Martín de Valdeiglesias) y la Playa del Alberche (Aldea del Fresno) son evaluadas periódicamente por las autoridades sanitarias, que controlan la calidad del agua y las condiciones de uso. Respetar la normativa es imprescindible para preservar el equilibrio ecológico y evitar riesgos sanitarios.
Madrid, una Comunidad que con más agua del que imaginas
Madrid es mucho más que su capital. Es una comunidad que invita a descubrir paisajes acuáticos, practicar deportes de aventura y conectar con la naturaleza. Gracias a una red de empresas especializadas, una normativa específica y una apuesta por la sostenibilidad, el turismo del agua en Madrid es una opción refrescante y segura para todos los públicos.
