¿Qué gafas de sol elijo según la forma de mi cara?

El verano está a la vuelta de la esquina y algunas ciudades ya están viviendo temperaturas máximas. Por ello, queremos hablarte del complemento estrella, de ese que nos permite protegernos del sol al tiempo que es un accesorio de moda. Si siempre has querido saber por qué determinado estilo de gafas no te sienta bien, o cuáles serían las más adecuadas para ti, sigue estos consejos.

Al igual que ocurre con el corte de pelo, la forma de la cara juega un papel fundamental a la hora de decidirse por un estilo de gafas de sol o por otro. Para elegir bien, hay que detectar qué patrón se corresponde con tu rostro y tenerlo en cuenta en la tienda:

Forma de cara cuadrada

En este caso, como ocurre con las gafas de la vista, lo que debemos hacer es elegir unas monturas que se ajusten a nuestro rostro y dulcifiquen las facciones. Así, ahora que están tan de moda, puedes quedarte con una de esas gafas de montura redonda y apostar por poner un toque vintage o retro en tus looks de verano. Si la idea no te convence, o lo ves demasiado exagerado y moderno para tu estilo, entonces las mejores gafas de sol que puedes elegir para que te sienten bien son sin duda las de forma ovalada. No son tan llamativas, pero al mismo tiempo consiguen que esos rasgos de tu cara más fuertes se vean redondeados.

Forma de cara ovalada

Si así es la forma de tu cara, para acertar con las gafas de sol que mejor te sientan tienes muchas más opciones para elegir. De hecho, estás de enhorabuena, porque a esta forma de rostro casi todo le queda bien. En este caso, lo mejor es quedarse con una montura que sujete bien toda las gafas y se asiente bien en tu cara, pero puedes quedarte con la más pequeña o la más grande; con la más oscura o con la más clara. Y aquellas que tienen otra forma de cara tendrán mucha envidia por poder elegir el tipo de gafa de sol que más te apetezca.

Forma de cara triangular

En tu caso, las gafas de sol que más te van a favorecer son aquellas que tienen monturas más delgadas y poco exageradas. No te van nada bien las que son muy aparatosas y están cargadas de motivos y de diseños. La simplicidad con este rostro es la mejor opción. Si te gustan, puedes optar a los modelos más estilizados que tanto se llevan como las gafas con forma de ojo de gato o las que vienen con monturas que mezclan la pasta y el metal.