Mascarillas caseras para mejorar tu rostro en un momento

El rostro es nuestra carta de presentación y el secreto para que se vea perfecto no es taparlo con maquillaje sino nutrir y proteger la piel para que se vea radiante y sana. Esto lo puedes conseguir utilizando recetas de mascarillas caseras para el rostro. Pero en primer lugar, debes conocer tu piel para saber que mascarilla casera es la adecuada para ti.

Para saber qué tipo de piel tienes debes lavar tu cara con un jabón neutro. Los más recomendables son los de glicerina o de cualquier otro jabón que tú uses diariamente. Seca la cara utilizando un paño seco y suave. No frotes ni hagas presión. Luego espera una hora más o menos y mírate al espejo con una buena luz. Frota suavemente la cara con un pañuelo de papel. Si el pañuelo está limpio y seco lo más seguro es que tengas la piel normal. Si sientes la piel tirante y tienes zonas con escamas o enrojecidas y el pañuelo sale seco, seguramente tienes la piel seca. Pero si por el contrario el pañuelo se ve aceitoso al pasarlo por la cara casi seguro que tienes la piel grasa. También puedes tener la piel mixta si por la zona de la barbilla y la nariz es grasa y por otras zonas de la cara está escamada o roja.

Problemas para tratar con mascarillas

También debes tener en cuenta los problemas que quieres solucionar con las mascarillas: espinillas, acné, puntos negros. Las reacciones alérgicas a algún producto cosmético deben ser consideradas antes de elegir un producto para ti. Por eso cuando escojas una mascarilla casera, antes de ponerla en el rostro, prueba primero en la piel del brazo, si no tienes reacciones alérgicas, puedes aplicarla en la tez.

Se pueden hacer mascarillas caseras de cualquier producto que tengamos en la cocina pero hay que tener cuidado, pues no todo sirve, algunos ingredientes aunque sean naturales, pueden dañar tu piel. El bicarbonato de soda es usado por mucha gente para exfoliar el cutis, pero posee un pH de 9, excesivamente alcalino para la piel del cutis que tiene un pH de 2,4 o 3,4. Si lo usas puede que te reseque demasiado la piel y también elimine la flora bacteriana que vive sobre ella. El vinagre de sidra de manzana tiene un pH parecido al de la piel, pero por su componente ácido puede irritarla. El zumo de limón tiene un pH muy ácido y puede producir manchas en el rostro si te expones al sol.

A continuación te voy a enseñar a realizar las mascarillas caseras y tu veras cual es más adecuada a tu tipo de piel que tienes. Las dos últimas son las más adecuadas para pieles grasas y pieles que requieren un tratamiento reconstituyente. Las demás, puedes utilizarla con la piel seca o mixta.

Mascarilla de plátanos y miel

Coge un plátano bien maduro y machácalo con un tenedor. A continuación agrega dos cucharadas de miel y dos cucharadas de glicerina liquida que puedes conseguir en la farmacia o en una tienda naturista. Revuelve todo bien y colócalo sobre el rostro y deja actuar durante 30 minutos. Luego enjuaga con agua y seca.

Mascarilla de aguacate y aceite de almendras

Machaca la mitad de un aguacate bien maduro y añádele 1 cucharada de aceite de almendras. Aplícala por todo el rostro, deja actuar durante 30 minutos y luego retira con agua tibia. Mascarilla de aceite de coco y oliva Mezcla dos cucharadas de aceite de coco con una cucharada de aceite de oliva. Estírala sobre el rostro y deja actuar durante 30 minutos. Luego retira con agua tibia.

Mascarillas para piel grasa

Toma una rebanada de sandia y retira la pulpa y las semillas, quédate sólo con la parte blanca. Presiona esta parte sobre la piel de tu rostro y déjala actuar durante 30 minutos. Lava con agua tibia y termina con agua fría.

Mascarilla de aloe vera

Mezcla una cucharada de leche de almendras con una cucharada de azúcar moreno. Luego agrega un trozo recién cortado de aloe vera y revuelve bien. Estírala sobre el rostro y déjala actuar durante 20 o 30 minutos, luego retira con agua templada.

Mascarilla de papaya

Corta una rebanada de papaya y retira la pulpa y las semillas. Frota la piel de la papaya por tu rostro y déjala actuar durante 20 o 30 minutos. Luego enjuaga con agua templada.

Mascarilla revitalizante

Mezcla un yogur natural griego con una cucharada de zumo de naranja y una cucharada de gel de aloe vera. Revuelve bien y aplica sobre la piel. Deja actuar durante 20 minutos y luego enjuaga con agua tibia.

Para limpiar los poros y puntos negros

Primero humedece con agua tibia y luego aplica directamente aceite de bebé. Deja reposar durante cinco minutos y luego da un masaje durante cinco minutos. Retira con una toallita húmeda. Como ves tienes muchas mascarillas para elegir que se pueden preparar realmente rápido en casa.

Ya no tienes excusa para apostar por la medicina natural y sacar el máximo partido de tu belleza. ¿Con cuál te quedas?