El cometa interestelar más rápido jamás observado atraviesa el sistema solar a 209.000 km/h

El cometa 3I/ATLAS recorre el sistema solar a 209.000 kilómetros por hora, la mayor velocidad medida para un objeto de origen interestelar. Se trata del tercer visitante de este tipo registrado, y sus características han sido analizadas con el telescopio espacial Hubble, que ha permitido conocer nuevos detalles sobre su núcleo y su comportamiento.

Según el equipo de investigación liderado por David Jewitt, de la Universidad de California en Los Ángeles, el cometa ha vagado por el espacio interestelar durante miles de millones de años. Su velocidad se ha incrementado a lo largo del tiempo gracias a los efectos de honda gravitacional provocados por el paso cerca de estrellas y nebulosas.
La trayectoria exacta de 3I/ATLAS es imposible de reconstruir con precisión: "Es como vislumbrar una bala de fusil durante una milésima de segundo", señaló Jewitt en un comunicado.

Las observaciones del Hubble han permitido estimar que el núcleo sólido y helado del cometa podría tener un diámetro máximo de 5,6 kilómetros, aunque el tamaño real podría reducirse hasta los 320 metros. El núcleo no puede observarse directamente, ni siquiera con la capacidad de este telescopio, pero los datos actuales han reducido las estimaciones previas realizadas desde la Tierra.

Actividad cometaria registrada

El Hubble también captó una columna de polvo expulsada por la superficie iluminada por el Sol y el inicio de una cola de polvo que se aleja del núcleo. La tasa de pérdida de polvo observada es similar a la de cometas que se acercan al Sol desde el propio sistema solar. Sin embargo, en este caso, el objeto procede de otro sistema estelar de la Vía Láctea.

3I/ATLAS fue descubierto el 1 de julio de 2025 por el Sistema de Última Alerta de Impacto Terrestre de Asteroides (ATLAS), financiado por la NASA y operado por la Universidad de Hawái, cuando se encontraba a 680 millones de kilómetros del Sol. Permanecerá visible con telescopios terrestres hasta septiembre, antes de desaparecer tras el Sol y volver a ser observable a principios de diciembre.