El fentanilo, un potente analgésico opioide sintético, ha surgido como una preocupación significativa en el ámbito de la salud pública en todo el mundo. España, como parte de esta problemática global, no está exenta de los riesgos asociados con el consumo de fentanilo.
Su potencia es significativamente mayor que la de la morfina, lo que lo hace hasta 100 veces más fuerte. Este aumento en la potencia también aumenta drásticamente el riesgo de adicción a dicho fármaco.
Situación actual del fentanilo en España
En España, el consumo de fentanilo ha ido en aumento en los últimos años. La más reciente Encuesta sobre Alcohol y otras Drogas en España, un estudio realizado cada dos años por el Plan Nacional sobre Drogas del Ministerio de Sanidad, señala que el consumo de analgésicos opioides en la población de 15 a 64 años ha experimentado un leve incremento. En concreto, ha pasado del 15.2% al 15.8% entre aquellos que los han consumido alguna vez en la vida, ya sea con o sin receta, y del 3.6% al 4% entre quienes los han utilizado en los últimos 30 días.
Por otro lado, el consumo esporádico de fentanilo, es decir, haberlo utilizado alguna vez en la vida, ha experimentado un considerable incremento, pasando del 1.9% en 2018 al 14% el año pasado. Esto sitúa al fentanilo como el tercer opioide más empleado, superando a la morfina, que ha descendido del 14.7% al 6.9%, y quedando detrás de la codeína y el tramadol.
De acuerdo a este estudio, su utilización se ha incrementado en una proporción de ocho veces entre 2018 y 2022. En este último año, se prescribió a un total de 695,000 personas. Cabe destacar que España ocupa el tercer lugar a nivel mundial en cuanto a la administración de fentanilo.
Por otro lado, en 2018 la la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios (AEMPS) emitió una nota informativa en las que solicitaba que se respetaran las condiciones de uso del fentanilo, ya que más del 40% de las personas que recibieron su primera prescripción en atención primaria experimentaban dolor no oncológico, es decir, sufrían de una condición que estaba fuera de la indicación originalmente autorizada para este analgésico.
Otros problemas de consumo de medicamentos en España
El consumo de ansiolíticos en España ha sido motivo de atención en los últimos años, reflejando una realidad compleja en la gestión de la salud mental en la sociedad. Los ansiolíticos son medicamentos diseñados para aliviar los síntomas de ansiedad y trastornos relacionados. La Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios (AEMPS) del Ministerio de Sanidad ha informado de un aumento del 110% en la utilización de diazepam, comúnmente conocido por su marca comercial Valium. Este incremento posiciona a España como el país con el mayor consumo de esta benzodiacepina a nivel mundial.
El abuso de este tipo de medicamentos, conlleva riesgos significativos, incluyendo la rápida tolerancia, dependencia física y el peligro de sobredosis. El síndrome de abstinencia al interrumpir su consumo puede ser severo, perpetuando el ciclo de dependencia. Ante esta problemática, los centros de desintoxicación en España cada vez reciben más pacientes que buscan superar esta dependencia hacia el fármaco. La intervención profesional en estos centros es esencial para abordar la complejidad de la adicción al fentanilo y facilitar la recuperación hacia una vida libre de sustancias.