José María Fernández, el gaditano que ha perdido 150 kilos en seis meses: "Me estaba destruyendo a mí mismo"

La obesidad mórbida se ha convertido en una de las enfermedades más preocupantes en España. Según el Estudio Nutricional de la Población Española (ENPE), el 22% de la población adulta es obesa, sin distinción entre hombres y mujeres. Además, hay estudios que alertan que la mitad de la población mundial tendrá sobrepeso en el año 2050.

José María Fernández es un gaditano de 49 años que llegó a pesar más de 350 kilos. Actualmente, está ingresado en el Hospital Puerta del Mar en Cádiz. Ha conseguido bajar 150 kilos en tan solo seis meses, sin embargo, aún sigue estando lejos de su objetivo: bajar a los 180 kilos para someterse a un bypass gástrico y poder llevar una vida lo más normal posible.

Las tareas cotidianas como limpiar o hacer la cama se convirtieron en un desafío enorme para Jose María Fernández, pues llevaba meses sin poder levantarse de un colchón que estaba tirado sobre el suelo. Como mesita de noche usaba un microondas para poder calentar de forma accesible la comida que le traían los servicios de ayuda a domicilio. También usaba pañales y un orinal para hacer sus necesidades, dado que no podía levantarse de la cama para ir al baño.

Una depresión con varios intentos de suicidio

La obesidad mórbida del afectado fue consecuencia del fallecimiento de su madre hace 10 años y de una mala relación de amistad, lo que le llevó a una depresión con varios intentos de suicidio. José María Fernández había superado ya los 350 kilos de peso y, además, la pierna izquierda la tenía totalmente amoratada a causa de una elefantiasis, una retención de líquidos que le provocaba hinchazón y una mayor pérdida de movilidad.

La situación comenzaba a ser insostenible. Por ello, en abril de este año se marcó un objetivo: someterse a una dieta estricta y conseguir abandonar la cama en la que llevaba postrado desde enero.

Tras 14 meses sin salir de casa, el equipo de bomberos de Cádiz consiguió trasladarle al Hospital Puerta del Mar en verano. Hizo falta un despliegue humano en el que participó un dispositivo de 17 bomberos que instalaron grúas, pasarelas y rampas. Tardaron dos horas y media en sacar al enfermo por el balcón, debido a que por su condición no podía caminar y salir por el ascensor.

El portavoz de los bomberos explicó que todos se habían ofrecido voluntarios por un acto de caridad para el afectado. Fue una operación sin precedentes en España, puesto que el enfermo bajó por el balcón en una camilla sujetada por una grúa. En la puerta de su casa le esperaba una ambulancia medicalizada especial para personas con obesidad mórbida. También estuvieron allí sus vecinos, quienes se despidieron de él entre aplausos.

Una vez en el hospital, José María ha comenzado una nueva vida. Cada día, se somete a una dieta que no supera las 1000 kcal diarias, además de recibir medicación para orinar y para quitarle el hambre. Gracias a esto, ha conseguido pesar 205 kilos, aunque ahora debe bajar a los 180 para entrar en quirófano a ponerse un balón intragástrico.

Día a día la situación del enfermo se hizo más complicada, dado que no contaba con "el apoyo de nadie, ni su familia se preocupaba por él y solo recibía las visitas de la ayuda al domicilio, que le proporcionaban dos veces al día la comida", ha relatado el afectado en En casa de Herrero, de esRadio. Como consecuencia, ha añadido José María, "estaba encerrado en un bucle en el que solo lloraba destruyéndome a mí mismo".

El enfermo ha relatado que es "una persona muy solitaria" y con la única compañía que contaba era la de "una mascota". Tras la marcha de esta, José María "se vino abajo" al no tener el cariño de nadie. El gaditano cuenta cómo esa pérdida marcó un antes y un después en su vida, al darse cuenta de que "no quería vivir".

Así, decidió cambiar por completo y comenzó por llamar a los medios. Según ha comentado, "el Diario de Cádiz le hizo una primera entrevista". Gracias a ello, "le contactaron otros medios" y Casilda Varela, que le vio en televisión, decidió ofrecerle su ayuda contactando con un nutricionista. "Me hizo una dieta muy estricta y conseguí perder 100 kilos en mi casa", ha explicado en esRadio.

"Es la tercera vez que estaba así"

No era la primera vez que el afectado ha sufrido por esta enfermedad, pues según cuenta "era la tercera vez que estaba así". Sin embargo, probablemente sea la última, puesto que ahora "estoy muy ilusionado" y el cambio que ha realizado "ha sido brutal". "Nadie apostaba por mí, pero gracias a mi constancia y el apoyo de los médicos y las personas de redes sociales estoy vivo".

Pese a esto, es consciente de que el camino es largo, aunque con un objetivo claro: "Llegar hasta los 100 kilos y poder vivir una vida completamente normal".

El afectado ha querido mandar un mensaje esperanzador a los oyentes afirmando que "los milagros no existen", pero que si él "lo ha logrado, todos lo pueden conseguir siendo constantes". A pesar de que "salí por la ventana, si vuelve a casa será andando", ha comentado José María Fernández.